ENLACE PARANORMAL

"No hay nada oculto que no llegue a descubrirse, y no hay nada secreto que no deba ser conocido"

martes, marzo 07, 2006

HOMBRES DE NEGRO,RAZAS EXTRATERRESTRES

HOMBRES DE NEGRO


Desde los años cincuenta la gente que ha investigado seriamente sobre ovnis han sido repetidamente molestada con misteriosas llamadas telefónicas y entrevistas directas, acompañadas por feroces amenazas. Han ocurrido accidentes extraños, ha muerto gente en circunstancias misteriosas y, en general, se ha hecho quedar bien claro que investigar demasiado a fondo en la naturaleza de los ovnis era meterse en problemas. Estos suelen adoptar la forma de los "hombres de negro".

Donde aparecen, lo hacen normalmente en grupos de tres, vestidos con trajes negros y calzados con zapatos de gruesas suelas de crèpe. Unas veces van a la moda y otras con varias décadas de retraso. Las ropas son nuevas, y todos los objetos que llevan parecen salidos de fábrica. Suelen llegar en un Cadillac tipo limousine o, en una ocasión concreta, en un Buick negro de un modelo anticuado pero que olía por dentro como coche nuevo.

Todo el mundo se deshace en conjeturas sobre la identidad de estos hombres de negro. En un principio, los investigadores pensaron si serían agentes del gobierno, porque muchas veces decían ser de la C.I.A. o de las altas jerarquías de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos, exhibiendo las correspondientes tarjetas de identificación. Luego, los informes sobre sus visitas se hicieron tan frecuentes que los organismos gubernamentales se empezaron a preocupar y a desmentir los rumores que los asociaban con los HDN. Aparentemente, el asunto parecía preocuparles tanto como a los demás.



La saga de los Hombres de Negro está tan llena de incongruencias como todos los demás aspectos de las experiencias con ovnis. Pero lo que realmente me interesa es que se ajustan como un guante a la teoría de los aliados que adoptan la forma que el espectador espera. ¿Qué epopeya cósmica no estaría completa si su trinidad de individuos que representan a las fuerzas del mal, que hacen retroceder a los valientes investigadores en un espléndido combate de gladiadores, las fuerzas de la luz contra el poder de las tinieblas? Llegan, con un perfecto estilo gángster, en limousines negras, y vestidos con trajes negros a la moda de los años veinte.

Todo lo suyo es raro: sus ropas, su manera de hablar; sus carteras, peines y efectos personales son siempre nuevos; sus coches, aunque sean modelos antiguos, tienen el aspecto y el olor de salir de fábrica. El "metálico" visitante de los Christiansen parecía casi una réplica del monstruo de Frankenstein, con voz de computador, cable subiéndole por la pierna y todo el equipo.

También es interesante el detalle del vaso de agua, porque todo gasto considerable de energía psíquica parece quemar la humedad del cuerpo. El individuo concretó mucho la duración de la visita: sólo cuarenta minutos... ¿Es ése el tiempo durante el cual un aliado o compositum puede sostener la apariencia de un cuerpo físico?
Este es un gran misterio que la policía, los científicos y algunos ufólogos no han querido o no han podido investigar a fondo por lo tanto, no han comprendido en su cabal dimensión.

Los llamados Hombres de Negro, es un tema difícil y escabroso para muchos. Existen muchas especulaciones; unos comentan que son agentes de la KGB, de la desaparecida Unión Soviética, otros afirman que son agentes del FBI; otros mas opinan que son un grupo terrorista financiado por las mafias norteamericanas e italianas; otros cuantos mas señalan que son un grupo de brujos y hechiceros que han formado una "Orden Secreta" y que realizan practicas ocultistas, y el restante opina que son extraterrestres o "espías cósmicos".

Para contrarrestar todo este mar de dudas he aquí un breve , pero sustancioso articulo en el que tratamos la verdad acerca de los enigmáticos Hombres de Negro...

Se han presentado muchas teorías sobre la identidad de estos "hombres". Unos dicen que son agentes del gobierno americano; otros que son miembros de una antigua raza terrestre que vive en remotas regiones de la tierra, desconocida de los hombres.

Existe también la teoría de que son los "malos" entre nuestros hermanos del espacio, sean quienes fueren. A mí, desde luego, no me sorprende que tengan que ver con los ovnis, ya que añaden una nueva y amenazadora dimensión al drama, y acrecentan el misterio de una cuestión que ya está saturada de elementos alucinantes.

No hay duda de que son peligrosos, pero se trata de unas fuerzas inexplicables que han estado siempre con nosotros y que, mientras no hayamos aprendido los misterios de estas vidas elementales que pululan por el mundo, seguiremos en contacto con ellos por una u otra razón.

ESTÁN EN TODAS PARTES

Existen Hombres de Negro en el Pentágono, en el Kremlin, en Inglaterra, China, Japón, en todas partes de los cinco continentes. Las personas que los han visto los describen como "varones humanoides vestidos impecablemente con traje o con ropa negra".

Testimonios de decenas de personas los han visto descender de naves espaciales y detrás de cada suceso de importancia mundial.

COMUNICACIÓN "TELEPÁTICA"

Estos hombres casi no hablan.... Actúan. Se comunican telepáticamente entre ellos y tienen sus misiones que cumplir y su "territorio" que cuidar. Tres Hombres de Negro cuidaron a Margareth Thatcher cuando era presidenta del Reino Unido. Algunos otros estuvieran cuidando a Nixon hasta que sucedió el caso "Watergate". Cada presidente norteamericano tiene dos a cuatro Hombres de Negro que los cuidan.





RAZAS EXTRATERRESTRES


Sería una osadía decir exactamente el número de razas extraterrestres que visitan o han visitado alguna vez la Tierra, tomando fundamentalmente en consideración los testimonios de las personas que han tenido algún tipo de contacto y las pocas fotografías que se tienen de seres extraterrestres, se calcula que al menos 60 diferentes tipos de razas extraterrestres nos visitan.

Considerando a los seres más vistos y/o conocidos, se consigue una clasificación que es la siguiente:



Humanoides.- Estos seres son casi idénticos a nosotros los humanos, pueden pasar desapercibidos entre nosotros, sus características son: piel blanca, pálida o colorada, ojos claros, cabello rubio mayormente largo, contextura atlética, su estatura varia, se han presentado casos de seres humanoides de 1 m, los mas pequeños, 1,70 hasta 2 m los de una talla normal, y otros mucho mas altos, de 2,5 m de altura, 3 m hasta de 4 m los mas gigantescos.


Estas razas son altamente evolucionadas espiritual y tecnológicamente. Mayormente son benévolos con los humanos.

Se han presentado muchísimos casos de personas que han visto e incluso contactado con este tipo de seres. Provienen de distintos puntos de la galaxia, e inclusive de otras galaxias y de otros universos.
Como las Pléyades, de Sirio, de Proción, de Géminis, de Alfa Centauro, de Arturo, de Vega. Estos seres cooperan arduamente en la evolución espiritual de la raza humana.

Los pleyadianos serían los aportadores de sus genes para la creación de la raza humana.






Grises.- Estos son los alienígenas mas conocidos, existen al menos 3 tipos diferentes: los de aproximadamente 1,5 m de estatura, que son los más numerosos, provienen del sistema estelar binario Zeta 2 de la constelación del Reticulo. Los que miden alrededor de 2,20 m provienen de Orión, y los de 1 m de altura provienen de un sistema estelar cerca de Orión, llamado Bellatrax.




Sus características físicas entre ellos son similares, piel grisácea, cabeza grande con forma de “pera” invertida, sin pelos, ojos grandes y negros, boca pequeña sin labios, casi no tienen nariz, orejas sin pabellón auricular, su cuerpo es delgado, sus brazos y dedos muy largos, se reproducen por clonación ya que su sistema reproductor ha sido dañado presumiblemente por radiaciones nocivas.




Estos seres no tienen buenas intenciones con los humanos, son los responsables de las abducciones, parece que intentan cruzar su raza con la raza humana para crear una raza híbrida, que sería mejor que cualquiera de las dos o quizás estén intentando reparar sus daños físicos sirviéndose de los órganos, sustancias, o genes humanos.

Los grises son una raza también muy inteligente, por ello van ganando terreno en su deseo de control a la raza humana a través del convenio que tiene con los Estados Unidos y quizás otras potencias, ellos otorgan su tecnología, a cambio de vidas humanas, y la instalación de sus bases en los territorios que ciertos países les conceden. En EEUU, tienen bases ubicadas en Nuevo México y Nevada, una de ellas es el Area 51 por supuesto, que la información aqui dada os la negarán rotundamente.






Zoomorfos.- son extraterrestres con formas de animales. Pueden tener cualidades y características pertenecientes a diferentes especies combinadas.










Se han reportado pocos casos de este tipo de seres, pero existen, algunos tienen formas de primate, murciélago, peces, en esta categoría se incluye al famoso “Chupacabras”.




También se incluye aquí a los reptilianos, son seres altamente avanzados pero negativos y hostiles hacia los humanos. Habitarían en un planetoide conducido por ellos y estarían en busca de un nuevo planeta donde vivir.

Esta guía personal para identificar ovnis



Esta guía personal para identificar ovnis

Esta guía personal ha sido ideada para utilizarla en la determinación de viabilidad de la siguiente investigación sobre el fenomeno ovni en Nuevo Leon Mexico.


PARTE PRIMERA: Investigaciones Complementarias


GENERAL
Un informe ovni es digno de investigación complementaria cuando contiene información que sugiere que puede realizarse una identificación positiva con un fenómeno bien conocido o cuando caracteriza a un fenómeno inusual. El informe ha de sugerir casi inmediatamente, ante todo por la coherencia y claridad de los datos, que tiene algo valioso para la identificación y/o científicamente.

En general, los informes que han de recibir consideración son los que implican varios observadores dignos de crédito, al mismo tiempo o separadamente, y que conciernen a observaciones de mayor duración de un cuarto de minuto. Se harán excepciones cuando las circunstancias del informe se consideren extraordinarias.

Se dará especial atención a los informes en los que se alega una posición fija y los que implican trayectorias inusuales.



REGLAS GENERALES
Todo caso ovni será juzgado individualmente, pero hay una serie de «reglas generales» -cada uno de los encabezamientos siguientes- que serán útiles para determinar la necesidad de una investigación complementaria.

1. Duración de la observación.
Cuando la duración de una observación es menor de 15 segundos, hay muchas probabilidades de que no merezca la pena una investigación complementaria. Como precaución, sin embargo, no debe despreciarse el caso en que un gran número de observadores individuales coincidan en una observación inusual de pocos segundos.

Cuando una observación ha durado pocos segundos, el incidente, al ser investigado, ha demostrado haber sido originado por un meteoro o una mala identificación de un objeto común a causa de la falta de tiempo de observación.

2. Número de personas que informan la observación.
Las observaciones de escasa duración realizadas por un solo individuo rara vez merecen una investigación complementaria.

Dos o tres observaciones independientes competentes, tienen la autoridad de diez o más observaciones individuales simultáneas. Por ejemplo, 25 personas que se encuentran en un lugar pueden observar una extraña luz en el cielo. Ello tiene menos autoridad que si dos personas dignas de confianza observan la misma luz desde diferentes lugares. En el segundo caso se indica una posición fija.

3. Distancia desde el lugar de observación a la unidad militar más cercana.
Los informes que cumplen el criterio preliminar anteriormente establecido serán investigados siempre que se hayan producido en la zona inmediata al escuadrón concerniente.

Los informes que impliquen mayores distancias, la necesidad de investigación será inversamente proporcional al cuadrado de las distancias. Por ejemplo, una observación a 150 millas tendrá cuatro veces la importancia que otra de características similares a 300 millas.

4. Fiabilidad de la persona o personas que realizan el informe.
Para establecer la necesidad de investigaciones complementarias sólo puede emplearse la fiabilidad «a corto plazo» de los individuos. Esta se juzga por la lógica y coherencia del informe y por la edad y ocupación de la persona. Se prestará particular atención cuando la ocupación implica la información de observaciones o un conocimiento técnico.

5. Número de observaciones individuales informadas.
Dos observaciones totalmente individuales, especialmente cuando están separadas por una milla o más, constituyen causa suficiente para la investigación, suponiendo que no se hayan violado los criterios anteriores.

6. El valor de la obtención inmediata de información adicional.
El valor de la información decrece cuando no puede conseguirse a los pocos días. Es de gran valor obtener la información adicional de inmediato si se han cumplido los criterios previamente establecidos. Con frecuencia, si se recogen rápidamente, dos o tres cuestiones -condiciones climáticas, velocidad angular, cambios en la trayectoria, duración, etc.- son suficientes para una valoración inmediata.

Si la investigación se realiza al cabo de semanas o meses, los observadores originales dejan de tener valor por lo que respecta a una información adicional. En general, la interrogación tardía sólo produce una repetición de los hechos informados más una incapacidad de objetivación por parte del observador.

7. Existencia de evidencia física (fotografías, material, equipo).
En los casos en que exista evidencia física se realizará investigación complementaria aunque no se cumplan algunos de los anteriores criterios.



CONCLUSION PARTE PRIMERA
Se comprende que los anteriores criterios deben evaluarse en los términos del «sentido común». El informe original, por su estilo y claridad sugerirá casi siempre al lector si es de provecho.


PARTE SEGUNDA: Criterios de Identificación


GENERAL
Cuando un informe sobre ovnis cumple, en gran parte, los criterios descritos en la Parte Primera, y se realiza una investigación complementaria, el interrogador preguntará qué objeto u objetos vistos pueden haber servido como estímulo original para el informe. La palabra «objeto» incluye aquí los fenómenos ópticos, como reflejos de nubes, etc.

Frecuentemente, una o quizá dos soluciones serán sugeridas inmediatamente por la naturaleza del informe. La palabra «solución» no puede utilizarse aquí en el sentido científico. En el trabajo con ovnis, una solución significa que se ha llegado a una hipótesis que parece tener gran probabilidad de haber originado el informe.

Se incluye a continuación un grupo de hipótesis o ejemplos que han demostrado ser útiles para llegar a soluciones. Se comprobará cuántas cuestiones se han satisfecho por el informe y cuántas no. Se realizará un esfuerzo por obtener las preguntas no satisfechas tan pronto como sea posible.



GUIA SIMPLE PARA LA IDENTIFICACION DE OVNIS
1. PROPOSITO:

Esta publicación ha sido ideada para la utilización por el personal del Cuerpo Observador de Campo y es publicada para familiarizar a los observadores con los fenómenos comunes confundidos a veces con ovnis.

2. DEFINICIONES:

a) Objeto Volante No Identificado (OVNI): Se refiere a cualquier objeto aéreo con ejecución, características aerodinámicas o rasgos inusuales que no se conformen a ningún tipo de misil o avión actualmente conocido o que no pueda ser positivamente identificado con un objeto familiar.

b) Objetos familiares: Globos, cuerpos astronómicos, pájaros, etc.

3. OBJETIVO:

Debido a la prolongada observación del cielo, tanto durante el día como durante la noche, los objetos familiares como meteoros, aviones, globos, cuerpos astronómicos, reflectores, pájaros, etc., serán frecuentemente observados por el personal del GOC. A causa de las condiciones atmosféricas (inversiones de temperatura, polvo, nubes, etc.), los fenómenos comunes pueden confundirse a veces con ovnis. Es de desear quo todos esos fenómenos sean explicados. En este aspecto, el observador necesita de alguna regla general quo le facilite la identificación.

El objeto de esta publicación es facilitar al observador de campo las apariciones de objetos comunes bajo una o más de las circunstancias anteriormente descritas.

4. GUIA:

Se adjunta una lista de los fenómenos comunes quo pueden contemplar los observadores de campo durante el cumplimiento de su deber. Se recomienda quo se familiaricen completamente con estos criterios, ya quo pueden permitirles la identificación de los objetos con gran precisión.



CRITERIOS DE IDENTIFICACION
GLOBOS AVION METEOROS ESTRELLAS O PLANETAS
FOCOS FENOMENOS OPTICOS

GLOBOS
1. Forma: Redondeada, de cigarro, de aguja, o de bolo.

2. Tamaño: Los globos de hasta 100 pies parecerán generalmente desde el tamaño de una aguja al de un guisante sostenido a la longitud del brazo.

3. Color: Plateado, blanco o de otros colores. Posiblemente parecerá oscuro cuando se proyecta contra las nubes. A veces es transparente.

4. Velocidad: Velocidad errática de gran escala. En general quedan suspendidos, para descender a una velocidad aparente.

5. Formación: De uno solo a un racimo.

6. Estela: Ninguna.

7. Sonido: Ninguno.

8. Rumbo: Recto con ascensión gradual general, a menos quo esté cayendo.

9. Tiempo de observación: Generalmente largo. Nota: repentinamente el globo puede arder y desaparecer.

10. Condiciones de iluminación: De noche o de día pero generalmente al amanecer o anochecer.


AVION
1. Forma: De la convencional, a la circular o elíptica.

2. Tamaño: De cabeza de aguja a la real.

3. Color: De plateado a amarillo brillante (por la noche oscuro o del color de las luces). Chorro de escape de amarillo a rojo. Bajo ciertas condiciones, un avión que esté muy distante para ser visto reflejará la luz del sol desde las alas al fuselaje.

4. Velocidad: Generalmente sólo puede observarse la velocidad angular. Depende de la distancia, pero pueden descartarse objetos pequeños que crucen una gran porción de cielo en menos de un minuto. Un avión no lo hará, pero sí puede hacerlo un meteoro.

5. Formación: De dos a veinte. Si son más de veinte es más probable que sean pájaros.

6. Estelas: Puede tener o no (vapor y chorro).

7. Sonido: De cero a estridente o bajo, dependiendo de la altitud y de las alas. Bajo ciertas condiciones, puede observarse un avión que vaya alto sin escuchar el ruido.

8. Rumbo: Fijo, recto o ligeramente curvo (no errático; podría parecerlo si se aproxima de frente). Sin giros en ángulo recto, ni reinversiones repentinas, ni cambios abruptos.

9. Tiempo de observación: Más de quince segundos; generalmente, un minuto o dos.

10. Condiciones de iluminación: Noche o día.



METEOROS
1. Forma: Redondo a alargado.

2. Tamaño: Cabeza de una aguja al tamaño de la luna.

3. Color: Amarillo con rojo, verde o azul.

4. Velocidad: Cruza una gran porción de cielo en pocos segundos, salvo si viene frontalmente.

5. Formación: Generalmente solo; puede convertirse en lluvia de meteoros al final de la trayectoria. Ocasionalmente, aunque es raro, en pequeños grupos.

6. Estelas: Durante la noche, casi siempre una cola luminosa que puede persistir hasta media hora (raramente). Los meteoros diurnos son observados con menos frecuencia. Deja una estela humeante de blanquecina a negra.

7. Sonido: Ninguno.

8. Rumbo: Generalmente en descenso, pero no necesariamente en forma aguda. En raras ocasiones puede dar la impresión de una ligera elevación.

9. Tiempo de observación: Treinta segundos como máximo, generalmente menos de diez.

10. Condiciones de iluminación: Día y noche. Principalmente de noche.

11. Otras: Hay un meteoro excepcionalmente brillante al que se le llama globo de fuego. Son raros, pero extremadamente espectaculares, y en ocasiones han iluminado han alrededores como si fuera de día.



ESTRELLAS O PLANETAS
General

Los planetas Venus, Marte, Júpiter y Saturno son generalmente más brillantes que cualquier estrella, pero titilan mucho menos -a menos que estén muy cerca del horizonte-. Las estrellas lo hacen mucho más, y cuando están cerca del horizonte pueden dar la impresión de una luz parpadeante de muchos colores.

1. Forma: De punta de una aguja a estrella.

2. Tamaño: Nunca apreciable.

3. Color: Amarillo con variaciones de arco iris.

4. Velocidad: Las velocidades aparentes de las estrellas las llevan de este a oeste en el curso de la noche, pero a menudo se las ha informado como erráticas. El efecto es psicológico, pues la mayor parte de la gente es incapaz de considerar un punto que esté inmóvil. Ocasionalmente, la turbulencia de la atmósfera superior puede producir la apariencia de salto en una estrella (es raro), pero de todas formas su parpadeo da la impresión de movimiento.

5. Formación: No hay racimos de estrellas muy brillantes, pero las débiles se agrupan en sus constelaciones tradicionales. Nota: Un informe de cuatro o cinco luces brillantes en grupo no puede referirse a estrellas.

6. Estela: Ninguna.

7. Sonido: Ninguno.

8. Rumbo: Siempre describen un círculo de 24 horas alrededor del polo o del cielo en dirección este-oeste.

9. Tiempo de observación: Cuando la atmósfera está limpia, las estrellas son siempre visibles. La mayor parte de las estrellas se elevan o se ponen durante el curso de la noche. Las estrellas bajas en el cielo del oeste se ponen en una hora o dos. Las estrellas del este se elevan más.

10. Condiciones de observación: Noche; crepúsculo.


FOCOS
1. Forma: Redonda a elíptica.

2. Tamaño: De un guisante, a la longitud de un brazo, a una gran incandescencia luminosa según la altura de la nube.

3. Color: Blanco fluorescente.

4. Velocidad: De inmóvil á fantástica.

5. Formación: Usualmente uno, pero ocasionalmente dos o tres.

6. Estela: Ninguna.

7. Sonido: Ninguno.

8. Rumbo: Circular, recto, inmóvil o errático. Nota: Las nubes esparcidas pueden dar la impresión de que el objeto desaparezca y reaparezca en diferentes partes del cielo en pocos segundos.

9. Tiempo de observación: Generalmente largo.

10. Condiciones de observación: Noche.


FENOMENOS OPTICOS
General
Puede cubrir multitud de cosas. Los fenómenos ópticos que han sido informados como ovnis van de reflejos sobre nubes y capas de cristales de hielo (sundog) a muchos tipos de espejismos. Ningún tipo de fenómeno óptico puede establecerse como representativo de los demás. No hay límite a la velocidad de los fenómenos ópticos. Los reflejos pueden viajar a una velocidad increíble, como en el caso de un foco de alumbrado sobre las altas nubes, o permanecer inmóvil.

1. Forma: Generalmente redondeada, pero puede ser elíptica o lineal.

2. Tamaño: De una estrella a una gran incandescencia luminosa.

3. Color: Generalmente amarillento.

4. Velocidad: De inmóvil a fantástica.

5. Formación: Cualquiera.

6. Estela: Ninguna.

7. Sonido: Ninguno.

8. Rumbo: Cualquiera.

9. Tiempo de observación: Cualquiera.

10. Condiciones de observación: Día y noche.

11. Otros: Uno de los tipos estándar es, el sundog. En él se ve un gran halo luminoso alrededor del sol y de una a cuatro imágenes del sol a lo largo del halo con intervalos de 90 grados. Otro informe tiene que ver con frecuencia con un planeta brillante o incluso con la luna brillando a través de un cielo ligeramente encapotado. Se dice que los espejismos se producen cuando hay inversiones de temperatura en la atmósfera.


Falsos Ovnis


Aeronaves
No sólo aviones convencionales, globos o helicópteros pueden confundirnos. Existen aparatos voladores no convencionales, prototipos desconocidos pro la población y armas que engañarían al mejor observador. Si se observa una nave extraña, pero muy metálica y sólida, es probable que se trate de un ingenio terrestre. Aún así, es imprescindible tomar fotografías, para descartar cualquier cosa.

Astros Brillantes
Las estrellas Sirio y Aldebarán pueden causar confusiones en los más ansiosos.

Auroras Artificiales
Experimentos realizados por la NASA en julio de 1990 buscaban la creación de auroras artificiales, por medio del lanzamiento de litio y bario a cientos de km de altura. En su momento fueron tomados por ovnis e incluso provocaron alarma.

Bandadas de Aves
En algunas ocasiones, las aves, cuando emigran de noche, reflejan las luces, apareciendo a la vista del observador como una formación de platillos voladores.

Bengalas
Existen de dos tipos: uno de ellos es el que usan los aviones militares en misiones nocturnas o con condiciones adversas. Para iluminar se lanzan unas bengalas que, vistas a distancia podrían ser confundidos con "ovnis" por los más ufólatras. El otro tipo es el que usan algunos submarinos (los de Francia, entre ellos) para prevenir cualquier accidente con buques. Son de color verde.

Bólidos
Son meteoritos de grandes dimensiones, provenientes del espacio interplanetario, que al penetrar a gran velocidad en la atmósfera terrestre se fragmenta o estalla y se hace visible por uno o más trazos luminosos.

Chatarra Espacial
Estos restos de artefactos terrestres en desuso -satélites y basura espacial- suelen confundir a los observadores cuando entran en la atmósfera terrestre. La fricción con ella provoca una emisión de luz y reflejo durante la caída.

Fenómenos Meteorológicos Anómalos
Muchos avistamientos, especialmente los diurnos, tiene explicación científica. La atmósfera es una masa gaseosa, pero compacta, y los caprichos de la naturaleza son innumerables. Hay que tener en cuenta que algunas manifestaciones lumínicas de muchos fenómenos meteorológicos aún se desconocen -por lo tanto, son ovnis.

Globos de Iluminación
Una empresa francesa fabricó un globo, llamado Linux, que se utiliza para realizar actividades durante la noche. Para iluminar, cuenta con una potentísima luz halógena. Mirado desde alguna distancia, podría parecer un ovni suspendido sobre el suelo.

Globos Sonda
Son blancos, con una tamaño inferior a cuatro metros de diámetro y que por lo general se mueven de manera ascendente. Con el cambio de presión en la atmósfera, explotan, y dejan caer un paracaídas.

Halo Lunar o Solar
Es una especie de disco o aureola que rodea algunos astros en el cielo bajo determinada condiciones meteorológicas.

Imágenes Fantasmas
Son aquellas que aparecen tras revelar el rollo fotográfico. Muchas personas los atribuyen a ovnis invisibles. Suelen, algunas personas, ocupar cámaras infrarrojas y, de esta manera, "descubrir" ovnis. Pero habitualmente estos ovnis fantasmas se d3ebn a reflejos o parásitos en el lente al enfocar objetos luminosos.

Láser y Cañones de Luz
Las discotecas y espectáculos con proyectores lumínicos pueden reflejar en las nubes formas que se asemejan mucho a ovnis. En Santiago es habitual este fenómeno en los días de invierno, cuando las nubes reflejan las luces de la torre Entel.

La Luna
Bajo determinadas condiciones, nuestro satélite puede confundirse con un ovni. Por ejemplo, entre nubes o deformada por la niebla.

Meteoritos
Son masas de materia cósmica, restos de cometas o trozos de asteroide que se ponen incandescentes y que al friccionar con la atmósfera a velocidades enormes se desintegran, dejando una estela luminosa en el cielo. Son las conocidas "estrellas fugaces".

Mísiles
Bajo ciertas condiciones meteorológicas, y dependiendo de la distancia, es posible que un misil y su halo pasen como ovnis.

Nubes Lenticulares
Son formas caprichosas de las nubes, que adoptan formas de "platos voladores". Pueden llegar a ser muy definidas, pero normalmente no se mueven o lo hacen muy despacio, hasta que las corrientes de aire las difuminan.

Radiosondas
Para conseguir información meteorológica a más de 300 metros de altura, se utilizan unos cohetes llamados "radiosondas de incidencia vertical", los que miden unos pocos centímetros de diámetro y varios metros de longitud. Se lanzan desde más de 2000 estaciones en todo el mundo. Llegan a 200 km de altura, y cuando descienden lentamente en paracaídas entregan la información requerida. Pueden llevar a confusión, en especial cuando son lanzados.

Rayos Globulares o Estratosféricos
Son fenómenos de electricidad atmosférica, condensaciones de iones y otras manifestaciones meteorológicas poco habituales.

Satélites Artificiales
De día no son visibles -comúnmente- y de noche se pueden distinguir como puntos de luz que se mueven lentamente de oeste a este.

Venus
Una gran parte de los avistamientos ovnis son confusiones causadas por el planeta Venus. En algunas épocas del año aparece como un punto de luz muy brillante que, aunque permanece estático, bajo ciertas condiciones atmosféricas parece vibrar o moverse.


Clases De Naves Extraterrestres






Tipo 1: Huso
De estructura cilíndrica, extremos romos y una longitud que varía de unos pocos metros a más de un kilómetro, las referencias a estas "nodrizas" son frecuentes en la literatura ufológica.






Tipo 2: Panal
Objeto con estructura de panal, casi siempre asociada a una estela luminosa que deja a su paso, en dirección opuesta a su rumbo de vuelo.





Tipo 3: Foo-fighter
OVNI tipo "foo-fighter". Generalmente de un diámetro que oscila entre los pocos centímetros y un metro, y de características fundamentalmente lumínicas, los "foo-fighter" fueron vistos durante la Segunda Guerra Mundial por pilotos aliados y del Eje. Su nombre procede de una degeneración de la palabra francesa "feu" (fuego) y la inglesa "fighter" (caza) y se traduce como "caza de fuego".





Tipo 4: Nodriza
OVNI "nodriza". Pese a que los "timones" superiores sólo han sido descritos en un par de ocasiones, su forma alargada y el hecho de haber sido visto en compañía de otros objetos más pequeños, le han hecho ganarse a pulso el apelativo de "nave nodriza". Una expresión, por cierto, popularizada por el contactado George Adamski.



Tipo 5: Socorro
OVNI tipo "Socorro". Llamado así por haber sido visto el 24 de Abril de 1964 a las afueras de Socorro (Nuevo México) por el policía Lonnie Zamora. Su caso fue investigado por el Proyecto Libro Azul, que se encargó también de analizar las huellas que dejó el objeto (en realidad un trípode) sobre el terreno. Zamora describió también la presencia de dos pequeños humanoides vestidos con sendos monos ajustados al cuerpo.



Tipo 6: Cigarro
Se trata de otra de las variantes de los objetos triangulares observados durante la oleada belga de avistamientos OVNI de 1989-1990, y que motivó una de las más serias investigaciones oficiales sobre No Identificados de los últimos años. Incluso a raiz de las apariciones de estos objetos -capaces de detenerse en el aire durante minutos- se elevó una propuesta formal de crear un comité de investigación OVNI en el Parlamento Europeo.






Tipo 7: Campana
Este objeto campaniforme ha sido rara vez descrito (y más aún fotografiado) en los anales del fenómeno OVNI. Las escasas referencias que se poseen de él nos remiten a avistamientos en Australia y Nueva Guinea.



Tipo 8: Triangular
Nave triangular observada durante la oleada OVNI de 1989-1990 sobre Bélgica. Objetos de similares características fueron también observados sobre Galicia durante el flap se avistamientos de 1996-1997. Algunos expertos creen que aviones espía de la serie "Stealth" F-117 A pudieron haber dado pie a confusiones con esta clase de No Identificados.




Tipo 9: Pleyadiano
OVNI tipo "pleyadiano", observado y fotografiado por Eduard Meier en Suiza a partir de 1975. Esta clase de objetos están asociados a la historia de este contactado, que asegura que son "naves de reconocimiento" o "beamships" de las Pléyades. Muchos expertos creen que se trata de hábiles maquetas fabricadas para obtener imágenes fraudulentas de OVNIs.



Tipo 10: Saturnal
Platillo volante por excelencia. Esta clase de objeto, con sendas cúpulas -generalmente rotatorias- en su parte superior e inferior, fueron los más frecuentemente denunciados por los testigos durante la oleada de observaciones que siguió al avistamiento de Kenneth Arnold, en Junio de 1947. Fue fotografiado algo similar sobre la Isla Trinidad (Brasil) el 16 de Enero de 1958 por el buque oceanográfico "Almirante Saldanha".



Tipo 11: Ruan
Platillo volante que presenta una extremidad puntiaguda sobre su cúpula, similar a la que aparece en las fotografías obtenidas el 11 de Mayo de 1950 por Paul Trent, en su granja de McMinniville (Oregón, EE.UU.). Hasta el propio Comité Condon, que tanto desacreditó el fenómeno OVNI en su época, aceptó este OVNI como verdadero. Otro OVNI similar fue observado en Ruan, en 1954.





Tipo 12: Michigan
Nave discoidal similar a la fotografiada en 1952 en Barra de Tijuca (cerca de Sâo Paulo, Brasil). Según los cálculos de los expertos, el objeto tendría entre quince y veinte metros de diámetro, y presenta una cúpula superior que lo hace inconfundible.



Tipo 13: New Jersey
Esta clase de estructura aérea está asociada a dos importantes incidentes OVNI: Uno ocurrido el 26 de Junio de 1959 sobre la misión de Boianai (Nueva Guinea), en el que los testigos distinguieron incluso varias siluetas "humanas" sobre el objeto; y el otro en Santa Ana (California, EE.UU.) el 3 de Agosto de 1965, cuando un inspector de carreteras fotografió un objeto de ese tipo. Tras la observación, el OVNI se "desintegró" dejando un anillo de humo en el aire.





Tipo 14: Adamskiano
OVNI Adamskiano. Se llama así porque el primero en verlos y fotografiarlos fue el contactado de origen polaco George Adamski. A diferencia de otros OVNIs más "difusos" éste presenta ventanillas en forma de "ojo de buey" y tres bolas en su parte inferior que, según Adamski, formaban parte integrante de su sistema de propulsión. No pocos ufólogos creen que se trata de un modelo en miniatura fabricado por el propio Adamski, aunque nunca se confirmó tal extremo.





Ovnis En La Historia


Siempre Han Estado (Indice)
Desde los albores de la humanidad como tal, el hombre acepta como lógica la existencia de fuerzas inteligentes, de seres supuestamente no humanos -dioses, ángeles, demonios y un sinfín de intermediarios- que intervienen directamente en el curso de nuestra vida sobre este planeta.

Los textos y legados que en el curso de los tiempos han ido reflejando el acontecer de la historia de la humanidad están salpicados de testimonios que ilustran la presencia permanente de objetos volantes que evolucionan de forma inteligente a baja altura sobre la superficie terrestre. La lista de tales avistamientos en todo el mundo y en todas las épocas prueba que la actuación y la intervención de una o de varias inteligencias distintas de la nuestra forman parte integrante y continuada de la historia de la humanidad.

Si prestamos oídos al bioquímico inglés Francis Crick -Premio Nobel en 1962 por haber descubierto la estructura del ADN-, habríamos sido creados por una supercivilización del espacio que en una época remota infectó al planeta Tierra con un microorganismo destinado a desarrollarse en el tiempo hasta llegar a ser lo que hoy somos los seres humanos. Otros científicos secundan este supuesto, como por ejemplo Vsevolod Troitsky, de la Academia de Ciencias de la URSS, para quien la Tierra es un campo de experimentación de nuevas formas de vida, controlado por seres superiores y desconocidos para nosotros.

Los más antiguos legados de la humanidad parecen refrendar estos supuestos. Aportaré solamente dos ejemplos.

En el Popol Vuh, el Libro del Consejo de los indios quichés, de la gran familia maya, se dice: «Y los Maestros Gigantes hablaron, así como los Dominadores, los Poderosos del Cielo: Es tiempo de concentrarse de nuevo sobre los signos de nuestro hombre construido, de nuestro hombre formado, como nuestro sostén, nuestro nutridor, nuestro invocador, nuestro conmemorador. Haced pues que seamos invocados, que seamos adorados, que seamos conmemorados, por el hombre construido, el hombre formado, el hombre maniquí, el hombre moldeado.»

Algo similar recoge la Epopeya de la Creación, cuando pone en boca del dios creador y solar babilonio Marduk las siguientes palabras: «Produciré un sumiso Primitivo; 'Hombre' será su nombre. Crearé un Obrero Primitivo. En él recaerá el servicio de los dioses, para que ellos puedan descansar tranquilos.»

Sigamos pues la pista histórica de la presencia de estos supuestos dioses -en realidad, nada más que seres inteligentes tecnológicamente superiores a nosotros- en la atmósfera terrestre.


Los Testimonios Más Antiguos (Indice)
El volumen II de la Introducción a la Ciencia Espacial, publicado por la Academia de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, incluye un capítulo de estudio de los OVNIs. Se afirma allí literalmente que «los OVNIs son objetos materiales que están, o bien pilotados, o controlados por control remoto por seres que son de fuera de este planeta». Y también se afirma que «las visiones OVNI parecen extenderse a lo largo ya de 47.000 años».

El testimonio acaso más antiguo que relaciona a los supuestos dioses con los objetos volantes no identificados, sea el que transmiten los aborígenes de los montes Kimberley, en el noroeste de Australia.

Cuentan que en tiempos remotos sus dioses trazaron sobre las rocas unos dibujos antropomorfos de notable tamaño, los Wandjinas, con rostros carentes de boca y rodeadas sus cabezas por uno o dos semicírculos en forma de herradura, con finas líneas que irradia el círculo exterior. Después de ello y de instruir a los nativos, los Wandjinas o dioses se transformaron en serpientes míticas y se refugiaron en charcos cercanos. Cuentan los nativos que de vez en cuando se les puede ver de noche en forma de luces que se mueven a gran altura.

A gran altura debió moverse también un desconocido aparato volador, inteligentemente guiado, hace ahora unos 11.000 años. Así se desprende de los datos recogidos en los mapas de Piri Reis, que se conservan en el museo Topkapi de Istanbul. Fueron trazados en 1513 por el almirante de las flotas turcas Piri Reis, y muestran fielmente los accidentes geográficos de las costas americanas, incluyendo los de la Antártida. Con la notable peculiaridad de que en ellos el extremo Sur de la Tierra de Fuego enlaza por medio de la estrecha lengua de tierra con la Antártida, allí en donde hoy en día las aguas del estrecho de Drake enlazan entre sí a los océanos Atlántico y Pacífico. Cotejados los mapas con las fotografía infrarrojas aéreas que reflejaban el perfil submarino, se llegó a la conclusión de que realmente había existido este puente de tierra entre el continente sudamericano y la Antártida a finales de la última glaciación; o sea, hace ahora unos 11.000 años. Piri Reis había reseñado en sus mapas con asombrosa exactitud costas, islas, bahías y montañas que en parte hoy ya no son visibles, sino que están cubiertas por una considerable capa de hielo. El propio almirante Piri Reis indicó, en los textos explicativos de sus mapas, que para su confección se había servido de otros mapas anteriores, entre ellos uno requisado a un marino que había formado parte de las tripulaciones de Cristóbal Colón, y que fue capturado en aguas peninsulares ibéricas. Debemos concluir que alguien trazó con perfección la orografía terrestre de aquella zona del globo hace 11.000 años. ¿Quién fue? El cartógrafo americano Arlington H. Mallery afirmó en su día que no podemos imaginarnos como se trazó un mapa tan preciso sin el concurso de la aviación.


Artilugios Volantes En La Antigua India (Indice)
Vimos anteriormente como en su libro sagrado Popol Vuh, los indios quichés de la gran familia maya decían de nuestros creadores que éstos eran unos constructores. Damos ahora un salto en la geografía y nos vamos a la India, en donde podemos leer en la gran epopeya sánscrita del Mahabharata que precisamente Maia, el constructor, el ingeniero y arquitecto de los asuras, diseñó y construyó un gran habitáculo de metal, que fue trasladado al cielo. Era solamente uno de muchos habitáculos similares. Cada una de las divinidades Indra, Yama, Varuna, Kuvera y Brahma, disponía de uno de estos aparatos metálicos y voladores.

El gran sabio de la antigua tradición, Narada, explica que la ciudad volante de Indra se hallaba ininterrumpidamente en el espacio. Estaba rodeada de una pared blanca, que producía destellos de luz cuando el vehículo se desplazaba por el firmamento.

Otros aparatos automáticos se desplazaban libremente bajo agua y en las profundidades de los océanos de una forma similar a los modernos submarinos.

El texto sánscrito del Mahabharata se refiere normalmente a los aparatos volantes con el nombre de «vimanas».

Pero habla también de grandes ciudades -colonias- espaciales, de grandes ciudades submarinas, y de ciudades subterráneas.
Arjuna, una de la divinidades, disponía de un indestructible vehículo volador anfibio, pilotado por su ayudante Matali.

Todas estas construcciones y aparatos voladores, submarinos y subterráneos, están descritos en la epopeya del Mahabharata con gran lujo de detalles, con detalle de sus medidas y descripción de sus características.

También Valmiki, el autor de la otra gran epopeya hindú, el Ramayana, nos habla con absoluta naturalidad de los vehículos que -a voluntad de su piloto- volaban libremente por el aire. También eran metálicos y brillaban en el cielo.


Objetos Volantes Inteligentemente Guiados, En Los Textos Bíblicos (Indice)
Leemos en los textos bíblicos cómo el profeta Ezequiel nos narra su encuentro con un vehículo volante, que se le acercó tanto -junto al río Quebar, en la inmediaciones de Babilonia- que incluso vio a uno de sus tripulantes, el cual le habló a él personalmente.

Esta visión que Ezequiel tuvo, y que está descrita con lujo de detalles en los textos bíblicos, fue detenidamente analizada por el ingeniero de la agencia espacial norteamericana -la NASA- Josef Blumrich, quién concluyó que lo que vio el profeta fue efectivamente y sin ningún género de dudas una nave volante. Tanto es así, que dicho ingeniero -director de la Oficina de Construcción de Proyectos de la NASA-, rediseñó el aparato descrito por Ezequiel y patentó algunos de sus elementos.

También en la Biblia, la destrucción de las ciudades de Sodoma y Gomorra refleja con precisión los efectos de una explosión atómica, anunciada a Lot por dos emisarios que bajan de las alturas y comen alimentos en casa de su anfitrión.

Finalmente, en muchos pasajes de los textos bíblicos -comenzando por el libro del Exodo- se describen con detalle nubes inteligentemente guiadas. En el caso del libro citado, una de estas nubes -luminosa de noche y en forma de columna de humo de día- guía al pueblo de Israel en su huída de Egipto. Esta nube indica el camino a seguir, proporciona alimento, e incluso desciende hasta el suelo para que sus tripulantes (en este caso el mismo Yahveh) pueda dar órdenes verbales al caudillo de los hijos de Israel, Moisés.


El Ovni De Belén (Indice)
La estrella de Belén, cuya aparición está tan íntimamente ligada al fenómeno Jesús, es -como se puede repasar en los Evangelios- una «estrella» que se mueve y que, además, tiene la facultad de detenerse. No es extraño que una estrella esté aparentemente «parada» en el firmamento, como parece que lo están todas las que vemos normalmente, ni tampoco que una estrella se mueva, como es el caso de las estrellas fugaces o de los cometas. Lo que sí se sale realmente de lo usual es que haga ambas cosas: moverse y pararse. Y que, además, demuestre ser inteligente: «Salieron, y la estrella que habían visto en Oriente» -podemos leer en los Evangelios- «iba delante de ellos hasta que se detuvo encima de donde se hallaba el niño.»
Se le ha querido dar una explicación astronómica a este fenómeno de la llamada estrella de Belén, aduciendo que se habría tratado de la conjunción -tercera conjunción por aquellas fechas- de los planetas Júpiter y Saturno. En dicha conjunción los citados planetas se juntaron ópticamente en dirección Sur de tal manera que los magos de Oriente, en la ruta que seguían de Jerusalén a Belén, siempre tenían a estos dos planetas que formaban una sola estrella, delante de ellos. La estrella iba efectivamente, como dicen los Evangelios, precediéndoles.

Hasta aquí, todo correcto. Pero si hubieran caminado siempre en la dirección que les indicaba esta conjunción de Júpiter y Saturno -y dado que se trataba de un fenómeno extraatmosférico que por lo tanto, por mucho que avanzasen los magos, siempre habría estado situado por delante de ellos- a donde habrían llegado es a las aguas litorales del mar Rojo.

Pero no: se detienen a 7 km escasos de Jerusalén. ¿Por qué? Porque no iban en pos de la conjunción Júpiter-Saturno, sino de un objeto brillante que finalmente se detuvo a baja altura encima del lugar encima del lugar en el que se hallaba el niño: Jesús. Un objeto volador que se movía inteligentemente dentro de nuestra atmósfera.


Los Hijos Del Cielo (Indice)
Los antiguos habitantes de China se autodenominaban «hijos del cielo». Y su literatura clásica proporciona una abundante selección de observaciones de objetos volantes desconocidos, con especificación muy concreta del momento histórico en que apareció cada uno de ellos.

Una de las referencias más antiguas que podemos hallar figura en la obra Ciencia Natural, que en el capítulo X reza: «Bajo el reinado de Xi Ji» -hace aproximadamente 4.000 años- «fueron vistos dos soles en la ribera del río Feichang, uno de los cuales subía por el este, mientras que el otro bajaba por el Oeste. Ambos producían un ruido como el trueno.»

En época mucho más reciente, el escritor Wang Jia, que vivió bajo la dinastía de los Tshin, relata en su libro Reencuentro una historia acaecida en el siglo IV antes de JC: «Durante los 30 años del reinado del emperador Yao, una inmensa nave flotaba por encima de las olas del mar del Oeste. Sobre esta nave, una potente luz se encendía de noche y se apagaba de día. Una vez cada 12 años, la nave daba una vuelta por el espacio. Por esto se la denominaba Nave de Luna o Nave de las Estrellas». En su obra Observaciones del Cielo, otro historiador, que vivió entre los años 960 y 1279 nos da una imagen todavía más clara de esta nave del cielo, afirmando de ella: «Había una gran nave voladora expuesta en el palacio de la Virtud bajo la dinastía de los Tang. Medía más de 50 pies de largo, y resonaba como el hierro y el cobre, resistiendo perfectamente a la corrosión; se elevaba en el cielo para retronar después, y así continuamente.»

Por su parte, el historiador Zhang Zuo, autor de la Historia del Poder y de la Oposición, escribe también que «el 29 de mayo del año 2 bajo el reinado del emperador Kai Yuan, durante la noche, apareció una gran estrella móvil, del tamaño de una cuba, que volaba en el cielo del Norte, acompañada de otras estrellas más pequeñas; esto duró hasta el amanecer».

Otro texto, el Nuevo Libro de los Tang, reza en su capítulo XXII, dedicado a la Astronomía: «El año 2 bajo el reinado del emperador Quian-fu, dos estrellas, una roja y la otra blanca, que medían como os veces la cabeza de un hombre, se dirigieron una junto a la otra al Sudeste. Una vez paradas en el suelo, aumentaron lentamente de tamaño y lanzaron luces violentas. Al año siguiente, una estrella móvil brilló de día como una gran antorcha. tenía el tamaño de una cabeza. Habiendo llegado del Nordeste, sobrevoló dulcemente la región, para desaparecer finalmente en dirección Noroeste.»

En otro pasaje de este mismo libro podemos leer: «En marzo del año 2, bajo el reinado del emperador Tian Yu, cierta noche una gran estrella surgió de la bóveda del cielo. Era cinco veces más grande que un celemí y volaba en dirección del Noroeste. Descendió hasta treinta metros del suelo. Su parte superior lanzó luces de fuego de color rojo anaranjado. Sus luces llegaban a más de cinco metros. Se desplazaba como una serpiente, rodeada de numerosas estrellas pequeñas que desaparecieron en un abrir y cerrar de ojos. Se vió una especie de vapor que subía muy alto hacia el cielo.»
Esta es solamente una brevísima selección de cuanto puede leerse en los textos clásicos chinos acerca de los OVNIs.


Tráfico Aéreo En La Cuenca Mediterránea (Indice)
Autores como Plinio el Viejo, Plutarco, Dio Cassio, Séneca, Cicerón o Julio Obsequens fueron en mayor o menor grado conscientes de que los dioses estaban guiando a los hombres sobre la Tierra. Sin ir más lejos, en el libro octavo de la Eneida, Virgilio habla de «ruedas que transportaban rápidamente a los dioses».
En el Prodigiorum Liber (el Libro de los Prodigios), el historiador Julio Obsequens recoge textos originales de Cicerón, Tito Livio, Séneca y otros. Podemos leer allí:
«Siendo cónsules Cayo Mario y Lucio Valerio, se pudieron ver en diversos lugares de Tarquinia un objeto que semejaba una antorcha encendida que súbitamente cayó del cielo. Hacia el anochecer se vio un objeto volador circular, parecido en su forma a un "clypeus" (el escudo redondo empleado por los legionarios romanos) llameante, que cruzaba el cielo del Oeste hacia el Este.»

También podemos leer allí que «en el territorio de Spoleto, en la Umbría, una esfera de fuego, de color dorado, cayó a tierra dando vueltas. después parecía que aumentase de tamaño, se elevó del suelo, y ascendió hacia el cielo, en donde oscureció al disco del Sol con su claridad cegadora. Después desapareció en dirección al cuadrante Este del cielo.»

Tito Livio también informa por su parte: «Naves fantasma han sido vistas brillando en el cielo...Mientras que en el distrito de Amiterno aparecieron en muchos lugares hombres con vestidos destellantes, de lejos y sin acercarse a nadie.»
Son solamente unos botones de muestra de la abundante literatura clásica que refiere este tipo de avistamientos.


Intervienen En El Curso De Nuestra Historia (Indice)
Hay momentos concretos a lo largo de la historia de la Humanidad, en que figuras u objetos que descienden del cielo, intervienen en los asuntos de los hombres, e incluso llegan a decidir nuestras disputas en uno u otro sentido. En algunas ocasiones, la ayuda ha sido favorable al signo de la Cruz, si bien el motivo de este favoritismo se nos escapa. Así aconteció en las luchas de los cristianos contra los moros, y también -durante la conquista de América- en las luchas contra los indios.


La Gloria De Dios (Indice)
Una ocasión importante en que manifestaciones concretas del cielo ayudaron a los cristianos, se dio en plena campaña exterminadora de Carlomagno contra los paganos sajones. Así lo explica claramente el monje Lorenzo, en sus Annales Laurissenses. Explica en esta obra histórica cómo los sajones se habían rebelado contra las tropas de los francos, y avanzaban hacia el castillo de Sigisburg para conquistarlo. La oposición de los francos fue dura, motivo por el cual los sajones no pudieron culminar su gesta. Y leemos literalmente en la obra citada: «Entonces, cuando los sajones advirtieron que las cosas no iban a su favor, comenzaron a construir andamios desde los cuales pudiesen saltar valientemente al castillo mismo. Pero Dios es tan bueno como justo. Superó su valor, y el mismo día en que prepararon el asalto contra los cristianos que vivían dentro del castillo, la gloria de Dios apareció en manifestación encima de la iglesia en el interior del castillo. Los que lo observaron, muchos de los cuales aún viven hoy en día, dijeron que tenían el aspecto de dos grandes escudos de color rojo llameante, y que se movían por encima de la iglesia. Y cuando los paganos que estaban afuera vieron este signo, cayeron seguidamente en la confusión y quedaron aterrorizados por el pánico, huyendo precipitadamente.»
Como consecuencia de la intervención de este poder aéreo, los sajones se rindieron y decidieron en juramento solemne su conversión al cristianismo. Por lo tanto, acatar las leyes de Carlomagno.


América: Reestreno Del Drama De Moisés (Indice)
De Europa nos vamos a tierras norteamericanas. Porque si Yahveh hizo caminar a Moisés con sus seguidores por el desierto durante cuarenta años, el dios de los aztecas obligó a éstos a una caminata de casi 3.000 km, antes de que hallasen en una pequeña isla en medio del lago Texcoco, al águila de su profecía devorando a una serpiente. Era el símbolo que les indicaba que aquella era su tierra de promisión.
Los paralelismos entre el éxodo del pueblo de Israel y el éxodo del pueblo azteca comienzan con la personalidad misma de los dos protagonistas, Yahveh y Huitzilopochtli. Ambos querían ser considerados como protectores e incluso como padres, pero eran tremendamente exigentes, implacables en sus frecuentes castigos, y muy irritables. Ambos les indicaron a sus pueblos elegidos que abandonasen la tierra que habitaban. Ambos acompañaron personalmente a sus protegidos a lo largo de todo el peregrinaje. Yahveh lo hizo como ya vimos en forma de una curiosa nube o columna de fuego y de humo que les procuraba luz de noche y sombra de día, o les señalaba el camino que debían tomar. Huitzilopochtli, a su vez, acompañaba a los aztecas en forma de un gran pájaro. La tradición afirma que fue un águila o una grulla blanca, que les iba indicando la dirección en la cual debían caminar desde las tierras de Arizona y de Utah hasta el emplazamiento de la actual capital de México.

Pero lo más curioso es que los dos pueblos -israelitas y aztecas- transportaban una especie de caja sagrada que para ellos tenía una gran importancia y que servía para comunicarse directamente con la divinidad. Los israelitas llevaban la famosa Arca de la Alianza, y los aztecas llevaban un cofre, tal y como nos lo cuenta fray Diego Durán, historiador contemporáneo de la conquista: «Cuando llegaban a un lugar para quedarse en él durante algún tiempo, lo primero que hacían era construir un templo que servía para alojar el cofre en que llevaban a su dios.»


Los Escudos Volantes De Los Indios Hopi (Indice)
Si Carlomagno fue ayudado por unos escudos volantes y los aztecas -procedentes de Arizona-contaron con el apoyo de una inteligencia que dominaba el vuelo, ambas circunstancias se repiten en la historia de los indios hopi -establecidos en la actual Arizona-. Según explica su jefe White Bear, contaban sus antepasados que sus abuelos habitaban unas tierras situadas al Oeste, o sea en algún punto del océano Pacífico. Al hundirse estas tierras, unos seres descendidos de las alturas -los katchinas- les ayudaron a trasladarse al continente americano, en parte sirviéndose de escudos volantes. Estos seres sabían además tallar grandes bloques de piedra, dominaban el transporte aéreo de estos bloques, y eran diestros en la construcción de instalaciones subterráneas. Algo muy parecido a lo que nos narran según vimos los antiguos textos sánscritos.


Ovnis Durante La Conquista De América (Indice)
Alguna inteligencia seguía sobrevolando a los humanos en tierras americanas siglos más tarde. Así, Bernal Díaz del Castillo, cronista de Hernán Cortés, escribe en su Historia verdadera de la conquista de la Nueva España: «Dijeron los indios mexicanos que vieron una señal en el cielo que era como verde y colorada y redonda como rueda de carreta y que junto a la señal venía otra raya y camino de hacia donde sale el Sol y se venía a jnutar con la raya colorada». Y, un poco más adelante: «Lo que yo vi y todos cuantos quisieron ver, en el año 27» -1527- «estaba una señal del cielo de noche a manera de espada larga, como entre la provincia de Pánuco y la ciudad de Tezcuco, y no se mudaba del cielo, a una parte ni a otra, en más de veinte días.»
Son, una vez más, solamente dos pinceladas de los mucho objetos volantes no identificados que -en este caso- refieren las crónicas de la conquista de América.


¿Vienen De Sirio? (Indice)
Cuentan los dogones, que habitan en las tierras de la actual república africana de Mali, que desde siempre, el elemento para ellos más importante del firmamento es una estrella pequeña que gira alrededor de la gran estrella Sirio, el brillante astro que luce en la constelación del Can Mayor. Por los estudios realizados de sus tradiciones, podemos afirmar que poseen este conocimiento por lo menos desde el siglo XII. Cuando en cambio la moderna astronomía no descubrió Sirio B -que orbita alrededor de Sirio A y es invisible al simple ojo humano- hasta mediados de siglo pasado.

Los dogones conocían por lo menos siete siglos antes la existencia de Sirio B, siendo conscientes además de que es invisible. Pero además, el dibujo ritual que ellos trazan para mostrar la órbita en que Sirio B gira alrededor de Sirio A, es absolutamente idéntico al dibujo que ofrece el moderno diagrama astronómico de la órbita de Sirio B alrededor de Sirio A. Los dogones saben además que Sirio B es un cuerpo extraordinariamente pequeño. Y también aquí la astronomía oficial confirma que Sirio B es una «enana blanca», una estrella pequeña. También dicen los dogones que Sirio B es la estrella más pesada que existe. Y una vez más la ciencia confirma: Sirio B -a la que ellos llaman Po Tolo- es, en cuanto enana blanca, una estrella extraordinariamente densa, o sea, extraordinariamente pesada.

Pero además, y de acuerdo con la mitología de los dogones, Po Tolo da una vuelta alrededor de Sirio A cada cincuenta años. Y confirma también aquí la moderna astronomía que Sirio B da una vuelta alrededor de Sirio A exactamente cada cincuenta años. Más asombroso aún: durante sus festividades rituales, los dogones rinden honores al hecho de que Po Tolo gire sobre sí mismo. ¿De donde podían saber -no los dogones, sino nadie- desde hace ocho siglos que las estrellas giran sobre su propio eje?

Cuando se les plantea a ellos esta pregunta, afirman que un día llegaron unos seres procedentes del sistema de Sirio, con la finalidad de instaurar la sociedad en la Tierra. De ellos proceden sus conocimientos. Estos seres desconocidos -a los que ellos llaman «nommos»- descendieron a la Tierra en un arca que, antes de aterrizar, giraba o volteaba en el aire. El aterrizaje aconteció en el Nordeste del país de los dogones y produjo un ruido importante al descender el arca. Los dogones describen el aterrizaje de forma muy gráfica: «El arca se posó en la tierra seca del Zorro y desplazó polvo, levantado por el remolino que causó. La violencia del impacto dejó el suelo rugoso. El arca era como una llama que se apagó al tocar la tierra.» Era roja como el fuego y se volvió blanca cuando aterrizó.


Y Muchos Más ... (Indice)
La brevedad de un artículo no da para más. En el tintero se han quedado centenares de casos OVNI en la Antigüedad, en la Edad Media y en tiempos más recientes, hasta llegar a aquellos que cité al principio, vistos por Kenneth Arnold en 1947. Para enumerar solamente a algunos de los más importantes, falta hablar de los Objetos Volantes No Identificados vistos por Tutmosis III el Grande, por Alejandro Magno y por Timoleón (ambos en el s. IV a.JC), por Cayo Julio César y por Pompeyo (s. I a.JC), y por Constantino el Grande (s. III). También la espada volante vista sobre Jerusalén en el s. I y citada por Flavio Josefo. Ni hay que olvidar el cuadro La Madonna e san Jiovannino de la escuela de Filippo Lippi (s. XV), en que junto a la Virgen aparece en el cielo un OVNI, ni el OVNI citado en los anales de la Inquisición, y que transportó al Dr. Torralba en viaje de ida y vuelta de Valladolid a Roma en 1527.

Deben recordarse igualmente los fenómenos OVNI citados por Pedro de Valdivia y por el cronista Pedro Cieza de León (s. XVI), y por Fray Junípero Serra (s. XVIII). No deben omitirse los cilindros volantes vistos sobre Nuremberg en el s. XVI, la viga aérea vista por Benvenuto Cellini, los globos ígneos que sobrevolaron Basilea también en el s. XVI, la columna brillante que se presentó la víspera de la batalla de Lepanto, una vez más en el s. XVI, los OVNIs que evolucionaron sobre Cataluña en 1604, recogidos en el Diari de Jeroni Pujades, iguales chismes volantes vistos sobre el mediodía de Francia en 1621, la hostia volante que sobrevoló Braga en 1640, la bola volante que sobrevoló Robozero, en Rusia, en 1663, y finalmente los 446 OVNIs reportados por el director del observatorio mexicano de Zacatecas, en 1883.

En absoluto puede afirmarse -a la vista de este repertorio- que los OVNIs son una invención o un fenómeno característico de nuestro siglo XX

Los ovnis




Los ovnis





Especialmente en los crepúsculos y amaneceres, el sol puede ser fácilmente confundido con un objeto no convencional. También la luna, en determinadas fases puede llevar a un error semejante.

Con una atmósfera límpida, muchos planetas pueden ser tomados equivocadamente por «luces en el cielo». A veces se han denunciado ovnis que luego resultaron ser el lucero de la mañana, Venus en el oscurecer o Júpiter a ras del horizonte. La aproximación excepcional de estos dos últimos planetas en febrero de 1975, provocó un buen número de presuntas observaciones ovni.

Algunos meteoros de gran tamaño parecen desplazarse lentamente (en particular aquellos que lo hacen en el sentido de rotación de la tierra), dejando una huella brillante que puede persistir hasta varios minutos. Los bólidos, meteoritos, estrellas fugaces, novas y supernovas, como postula el físico Joseph Kaplan, pueden ser tomados equivocadamente por naves que vienen de otros mundos.



Muchos científicos aseguran que estos acontecimientos podrían ser causados por fenómenos atmosféricos: peculiares formaciones nubosas, perturbaciones eólicas, reflexión lumínica de la luz solar, refracción atmosférica, espejismos ópticos. Cuando en las noches del 20 y 21 de julio de 1952 se avistaron extraños discos sobre el Capitolio de Washington, la explicación oficial fue que, al haber capas calientes de aire por encima de las frías, se producía una distorsión óptica. También estas anomalías, según los meteorólogos, pueden dar lugar a una distorsión de las ondas de radar provocando ecos fantasmas en las pantallas.


Otras hipótesis se apoyan en los fuegos fatuos: en los charcos y marismas, la descomposición orgánica libera metano. Cuando este gas entra en ignición por combustión espontánea o caída de rayos, por ejemplo, se producen globos luminosos que flotan sobre el agua estancada. El mismo efecto se produce con el vapor de amoníaco.

Los terremotos podrían también ser los causantes de efectos luminosos extraños: en numerosas ocasiones se han observado fosforescencias a masas incandescentes ante el desencadenamiento de un terremoto; esto indica que los temblores de tierra disparan ciertas reacciones electromagnéticas con un componente luminoso en la atmósfera.


Hay un fenómeno electromagnético llamado «corona» que en ocasiones se advierte desplazándose a lo largo de cables de alta tensión en forma de fuerte luminosidad semejante a una esfera, disco o anillo. A baja altura adoptaría a veces la forma de un rayo globular y esto explicaría por qué aparecen OVNIS tan frecuentemente en proximidad con los tendidos eléctricos de alto voltaje.




Según Klass, los automóviles y peatones portadores de cargas eléctricas atraen los plasmas. Estos serían capaces de ionizar el aire aprisionado bajo el capot de un vehículo y provocar un colapso de sus circuitos eléctricos (típico efecto de la casuística ufológica). El físico Noel W.Scott ha producido en laboratorios pequeñas lentillas rojo-anaranjadas de vapor ionizado con aspecto de platillos resplandecientes, al introducir vapor en un vacío parcial.

Michael A. Persinger y Gyslasine F. Lafreniere han encontrado una correlación positiva entre fenómenos anómalos, fallas geológicas y llamaradas solares, tras el estudio de 1.242 casos ufológicos y 4.818 sucesos insólitos de todo tipo. Estos investigadores de la Universidad Laurentian de Sudbury (Ontario) sostienen que tanto la eyección explosiva de material ardiente en la superficie del sol, como los movimientos sísmicos, pueden generar campos energéticos localizados, que en ciertas circunstancias crean plasmoides luminosos a incluso interfieren en el funcionamiento normal del cerebro humano, provocando alucinaciones «ufológicas». Algunos de tales plasmas solares, son detectables por el radar





El inquietante fenómeno del virus epidémico alienígena prendido al cuerpo social, ha sido brillantemente estudiado por Jacques Vallée en su libro «Mensajeros de la Decepción». En él demuestra cómo una baraúnda de neosectas espiritualistas transplutonianas le están lavando, con notable éxito, el cerebro al mundo, consiguiendo rápidamente que el público baje su guardia y acepte indiscriminadamente estas seductoras ideas.

Nuevos Cristos vienen a ayudarnos en naves del espacio. Lo oculto, lo esotérico y, claro está, lo extraterrestre, está de moda; en la segunda mitad del siglo han arraigado profundamente en el acervo de la mitología popular. Esto a su vez promueve el contagio y se forma la «bola de nieve extraplanetaria».


Vehículos Convencionales

Muchas veces se han visto una serie de luces viajando al unísono; este fenómeno que se ha tomado por una máquina voladora, podría ser un aprovisionamiento de combustible de dos aviones en vuelo.

Según J.Gordon Vaeth y Urner Liddel, hay en la atmósfera muchos artefactos científicos y meteorológicos que pueden ser tomados por naves espaciales (globos-testigo, sondas especiales de alta costa, blancos para radar). Los cohetes meteorológicos, por ejemplo, dejan escapar nubes de sodio que al ser iluminadas en la alta atmósfera por los rayos solares producen extraños efectos luminosos.

Los aparatos de investigación espacial producen un halo luminoso al entrar en la atmósfera. Satélites espaciales particularmente brillantes cambian su luminosidad periódicamente al rotar sobre sí mismos. La basura espacial (restos de vehículos aéreos, residuos abandonados en el espacio por sondas y astronautas), en circunstancias especiales puede ser vista desde La Tierra. Según Philip J.Klass, hay muchos subproductos erráticos de origen industrial flotando en nuestra atmósfera, como nubes de escoria, polvaredas de carbón y espuma de detergentes.



Discoteca Flotante En El Cielo


Visión artística y fantástica de un objeto volante no identificado.

Los entomólogos P.S.Callahan y RA.Mankin, de los Estados Unidos, explican que el exoesqueleto de los insectos o mariposas es un excelente dieléctrico, alrededor de un electrolito (los fluidos biológicos del organismo animal). En contacto con un campo eléctrico como el producido por una tormenta, por ejemplo, emite brillantes luces y colores por los extremos de sus antenas y patas. Un aluvión de este tipo de insectos, produciría un interesante fenómeno visual. Para Norton T.Novitt el fenómeno ovni podría estar originado por las hormigas voladoras. Según este científico, estos insectos se reúnen periódicamente en masas de hasta 37 millones de individuos, ejecutando un rito nupcial. Si una de estas gigantescas colonias se topara con una carga de electricidad estática -nos dice- puede originar una materia luminosa que recuerde un ovni.



Errores De Percepción


El matrimonio Barney aseguró haber sido secuestrado por un ovni durante dos horas.

Edgar F. Mauer opina que muchos fenómenos son atribuibles a algunos estados patológicos de la vista: las células diferenciadas en el humor vítreo pueden proyectar sombras en la retina, siendo éstas percibidas como puntos en movimiento y la presión del viento sobre los ojos puede provocar también la visión de pseudo luces.

Hay una larga lista de afecciones psicopatológicas que dan origen a estados alucinatorios. En estos casos el sujeto ve efectivamente «algo» que no tiene existencia material comprobada. Según Pierre Delval pueden producirse visiones de imágenes luminosas que, inconscientemente o no, son animadas por el protagonista en función de su propio mundo interior.

También el cerebro -según Alain Gadmer- es capaz de fabricar ciertas observaciones en función de meras analogías; la información percibida es tratada de acuerdo a elementos anteriormente memorizados.

Los elementos más cotidianos y corrientes, también pueden interpretarse de una manera totalmente fantástica cuando el sujeto está bajo la influencia de ciertas drogas o del alcohol y son muchos los que opinan que esta es la circunstancia presente en los fenómenos ovni.



Mixtificaciones, Fraudes y Fabulaciones


El brasileño Antonio Villas-Boas fue abducido por un ovni y seducido por una alienígena hembra.

Se llama «efecto excitación» a aquél por el cual el testigo o informador, al hacer un reporte de los hechos, selecciona como más prominentes aquellos datos menos exactos y seguros, no refiriéndose en cambio a las cuestiones más fiables.

El «efecto reportaje» es la selección de detalles llamativos y espectaculares con los oportunos añadidos y exageraciones al relatar lo ocurrido ante el público o los medios de comunicación.

A mucha gente le fascina la fama, la notoriedad, verse en letras de imprenta; para tener acceso a ello no dudan en falsificar deliberadamente los hechos, inventando una colorista historia de ovnis. Según Donald I.Warren, muchos de ellos son unos pobres diablos fracasados que lo hacen con el fin de sobresalir y compensar sus frustraciones y falta de éxito en la vida. Por lo general, son testigos de escasa relevancia socioprofesional.

Isaac Asimov, dice: «Más importante que lo que vemos en el cielo es cómo lo interpretamos. Aquellos que desean creer que las tripulaciones de las naves del espacio son guardianes benevolentes de nuestro bienestar, son personas inseguras que, de este modo, se agarran desesperadamente a unas fantasías que les proporcionan la ansiada seguridad».

Por último, hay una interpretación crítica, escéptica a ultranza y maximalista en el sentido de que todo lo relacionado con ovnis son falacias, un mero epifenómeno sociológico sin realidad física basado en denuncias de individuos mitomaníacos.



Artefactos Aéreos De Tecnología De Vanguardia

Los pilotos de los platillos volantes podrían ser criaturas que comparten la tierra con nosotros. Desconocidas para la mayoría de los mortales a ignoradas por la ciencia oficial, estos «ultraterrestres» son indígenas de nuestro propio planeta y la causa directa no sólo de la aparición de los ovnis sino de toda suerte de fenómenos psíquicos, paranormales y hasta religiosos. Esta idea, sustentada -entre otros- por el Doctor Jacques Vallée, se apoya en la abundancia de tradiciones orales y escritas sobre estas criaturas que aparecieron en muchísimas civilizaciones anteriores.

Entre las muchas razas que nos visitan, algunas de ellas podrían ser los habitantes de continentes perdidos (Atlántida, Lemuria o Mu) que antes de que éstos fuesen sepultados por el océano buscaron refugio en algún lugar seguro y recóndito de la tierra, en un recinto de naturaleza material o «etérica» conservando todas sus prerrogativas tecnológicas, entre ellas los dispositivos de avanzado diseño para vencer el espacio.

Sea que provengan de otros planetas y/o planos o de la propia Tierra, de manera transitoria o permanente pueden utilizar recintos especialmente acondicionados como bases de operaciones. Se ha especulado mucho sobre la posibilidad de que existan bases alienígenas secretas en áreas remotas como la Antártida, Groenlandia, la selva amazónica, las montañas del Tíbet, y muchos otros lugares deshabitados o semiexplorados.



Teorías De La Tierra Hueca







Durante muchos años se creyó que la Tierra era hueca, pero hasta 1968 no hubo ninguna prueba de ello. Ese año, unas fotos tomadas por un satélite mostraban claramente un agujero enorme en el Polo Norte.

Según Raymond Bernard, no todos los ovnis serían extraterrestres: algunos provienen del interior del globo terráqueo que es parcialmente hueco y posee sendas aperturas en los polos.

Se dice que el Almirante Byrd, explorador del Polo Norte, penetró en esta región desconocida, encontrando una tierra de clima templado con montañas, bosques, ríos, lagos, vegetación y vida animal.

Para Brinsley le Poer Trench, miembro de la Cámara de los Lores británica, este mundo subterráneo habría sido construído por los habitantes de la Atlántida, para protegerse de catástrofes oceánicas y sísmicas. Las dos entradas localizadas en los polos (que habrían sido incluso fotografiadas por los satélites americanos) son las que dan acceso al mundo exterior. Allí se alojan desde hace más de once mil años los «barcos del espacio» que nos visitan en la actualidad. Robert E. Dickhoff y Michael Barton X, también son partidarios de la hipótesis de un mundo subterráneo. Los platillos volantes -según ellos- son oriundos de una gran «conurbación» integrada por siete metrópolis subterráneas, comunicadas entre sí por unos conductos huecos y con aperturas que afloran en el Tíbet, Siberia, América del Norte, Sudamérica y ciertas remotas cumbres montañosas. Fueron construídas por los marcianos que en su día habían acudido a colonizar la tierra y que se establecieron en ellas con el fin de escapar a la radioactividad que siguió a un conflicto atómico entre Atlántida y Lemuria. Sus naves interplanetarias entran y salen por las mencionadas aberturas superficiales y su propulsión se basa en las corrientes magnéticas planetarias. Sus tripulantes supervisan desde hace muchos siglos el destino de la humanidad.



Civilizaciones Suboceánicas







La hipótesis de bases submarinas es una de las más recurrentes de la fenomenología ufológica.

Antonio Ribera, Will Carson y Otto Binder dan como posible un origen subacuático a los ovnis. El setenta y uno por ciento de la superficie del globo está cubierta por las aguas, con profundidades de hasta diez mil quinientos metros (lo suficiente como para sumergir el monte Everest). ¿Qué mejor sitio -nos dicen- para ocultarse de los pobladores de la tierra firme?...

Se han registrado centenares de observaciones de cuerpos raros sumergiéndose en el mar, evolucionando en sus aguas o emergiendo del mismo. A veces con tal asiduidad que han dado pie a especulaciones sobre la existencia de «platillopuertos» como los de la zona de Malasia en el océano indico o los del golfo San Matías en la Patagonia. Ivan T.Sanderson, uno de los más competentes estudiosos de lo insólito, después de Charles Fort, mantenía la tesis de que en cada medio (agua, tierra y aire) podrían florecer complejas culturas inteligentes separadas entre sí como en compartimentos estancos. Concretamente en el inmenso volumen del agua oceánica habitarían razas conscientes capaces de surcar los cielos en vehículos anfibios.



Fenómenos Metaterrestres Tridimensionales
Merece la pena considerar la eventualidad de que los hombres del espacio hayan fundado una civilización que se extienda por todo el universo, sin vinculación particular a planetas específicos, residiendo a perpetuidad en grandes naves superacondicionadas que vagabundean por el espacio libre. En esta concepción de los «Refugios Interestelares», navíos espaciales de considerable volumen podrían albergar a comunidades enteras durante varias generaciones.

Estas naves viajarían de continuo y en diferentes direcciones, con ánimo de satisfacer una curiosidad intelectual y científica, buscando nuevos mundos para habitar. También Galíndez, Peter Sharp y Borret postulan que los platillos volantes serían sondas de comunicación entre la superficie terrestre y sus voluminosas naves nodrizas.



Bases En Otros Planetas Y Satélites


Grandes cabezas, cuerpos pequeños y ojos saltones son las características de estos alienígenas observados en 1947 en Italia.

Todos los planetas y satélites del sistema solar han sido, antes o después, considerados bases de procedencia o tránsito de los platillos volantes. La posibilidad de que «ellos» sean de origen intergaláctico pero que hayan organizado «apeaderos» en cuerpos deshabitados de nuestro sistema solar, ha sido formulada nuevamente por Coral Elorenzen.

Los Fenómenos Transitorios Lunares (T.L.P.) son modificaciones circunstanciales y de corta duración observados por astrónomos profesionales o aficionados, por astronautas o simplemente registrados en fotografías del cercano satélite. Consisten en transformaciones aparentes y fugaces de la estructura del suelo lunar acompañadas a veces por otros fenómenos: brillos y fosforescencias de variadas tonalidades, nieblas, vapores que dificultan la visión óptica, luces móviles, desaparición y reaparición de pequeños cráteres, súbita visión de un nuevo cráter no apreciado anteriormente, figuras geométricas, estructuras con apariencia artificial, bandas longitudinales claramente diferenciadas del terreno circundante, pequeños promontorios o «cúpulas», etcétera.

Particularmente en Platón -un circo de fondo plano con 96 kilómetros de diámetro- se registraron abundantes y llamativos cambios en las cuatro últimas décadas del siglo pasado, reportadas con todo detalle por los miembros de la Royal Astronomical Society de Londres.

Considerando la gran masa de T.L.P. acaecidos durante varios siglos, unidos a determinadas observaciones de notable extrañeza, surge inevitablemente la sospecha de si algunas de estas ocurrencias no tendrían un origen artificial.



La Clásica Hipótesis Extraterrestre o E.T.H.


Son frecuentes las observaciones de objetos volantes no identificados en los aparatos de radar.

Esta es sin duda la más popular de las justificaciones a la incansable presencia de los ovnis en nuestra atmósfera. También es la que más adeptos ha conseguido en la comunidad científica y entre el cuerpo de ufólogos «profesionales». Presupone que estamos ante navíos no terráqueos, construidos por seres inteligentes comparables al Homo Sapiens, aunque tal vez mucho más avanzados en ingeniería, mecánica y psicología que nosotros. Residen en planetas y satélites de naturaleza asimilable a la de la Tierra. Tanto «ellos» como sus «mansiones y moradas» estarían compuestos de materia ordinaria perceptible a los sentidos humanos; es decir, su estructura atómica y molecular sería sólida, física y estrictamente tridimensional.

Para llegar hasta el sistema solar desde remotas regiones del universo, habrían tenido que cruzar vastos abismos siderales y para vencer tan inmensas distancias necesariamente habrán desarrollado dispositivos de desplazamiento espacial de gran eficiencia técnica. Es de suponer que hayan superado, de forma que no podamos ni imaginar, el callejón sin salida de la inviabilidad de velocidades superiores a la de la luz, postulado básico, como se sabe, de la teoría de la relatividad de Albert Einstein.



Hipótesis marciana: Los platillos se acercan desde el vecino planeta de la guerra. Por razones de economía universal -dicen Antonio Ribera, Manuel Pedrajo y L.Taylor Hanson- las oleadas de ovnis debieran registrarse en las fechas de las oposiciones de Marte, en ciclos de veintiseis meses, cuando el astro rojo se encuentra a una distancia mínima. Pero la experiencia a lo largo de los últimos cuarenta años no parece corroborar el supuesto de la invasión bienal de discos voladores.



Alternativa venusina: Son varios los que señalan que podrían provenir de Venus, entre otros el astrónomo Eloy Ortega. En los días próximos a la conjunción de este planeta con la Tierra y el Sol, los platillos volantes reaparecen sobre los cielos de casi todos los continentes.



Cinturón de asteroides: Por lo que afirman al menos media docena de «contactados», esta aglomeración de trozos de roca entre Marte y Júpiter es el residuo de la explosión del planeta «Maldek», que resultó destruido como resultado final de una contienda con armas de gran poder destructivo. Este conflicto se produjo después de atravesar un período de decadencia y negatividad generalizadas, parecido al que sufre ahora la Tierra. Una porción de los habitantes de Maldek, previendo el fin catastrófico de su planeta, emigró en sofisticados vehículos aeroespaciales y se estableció entre nosotros.



Los tres «de la cola»: Los «contactados» insisten uno detrás de otro en que los ovnis nos abordan desde Ganímedes, satélite de Júpiter, que, según los astrofísicos, denota unas aparentes condiciones de habitabilidad comparables a las terrestres. Muchísimos contactados aseguran que nuestro sistema no cuenta con nueve sino con doce planetas. Algunos ovnis comparecen en nuestros cielo desde el trío planetario que está aún por descubrir, y tal vez sea debido a que no se trata de astros compactos ordinarios, sino de planetas «etéricos», submateriales, invisibles al ojo de los mortales.



Otros sistemas estelares: Francisco Donis y otros seguidores opinan que los platillos volantes vienen desde Alfa Centauri y Próxima del Centauro. Duncan Lunan, científico escocés, supone que son sondas espaciales lanzadas hace trece mil años por los pobladores de un astro moribundo, en la región de Epsilon Bootis. La secuestrada Betty Hill, que fue trasladada a un ovni en 1961, cree que provienen de Zeta Retículi. Robert K.G.Temple asegura que su origen es un planeta perteneciente al sistema estelar binario de Sirio, cuyos pobladores los Nommos arribaron hace más de cinco mil años a lo que hoy es Libia. Allí -según ellos se mezclaron con los Dogon (tribu que perdura en Mali, al sur del Sahara), fundando una notable civilización que influyó profundamente en el nacimiento y desarrollo de las culturas sumeria y egipcia.



Mundos Interpenetrados


En 1975, en Arizona, Travis Walton sufrió un caso de abducción por alienígenas pequeños y cabezones.

Según Otto Binder, los ovnis y otros fenómenos conexos pueden originarse en un mundo cuyo grado de vibración esté una octava por encima del nuestro, implicando el concepto de «mundos dentro de otros mundos», interpenetrándose mutuamente. Los habitantes de cada uno de estos recintos vibratorios en particular sólo ven, oyen y tocan el sistema limitado de realidad que les ofrecen sus propios órganos sensoriales, capacitados para operar exclusivamente en un tramo muy definido del espectro total de la energía vibratoria. Así tendríamos mundos enteros invisibles al alcance de la mano, estratificados en «capas» o esferas interpenetradas; como si las bandas del interior de una cebolla se solapasen a interpenetrasen unas con otras y, no obstante, se mantuviese una abismal separación vibratoria entre todas ellas. J.B.Hasted, físico y parapsicólogo, sostiene que «hay un número infinito de «mundos que coexisten a su vez en el seno de un número infinito de dimensiones, pero no interaccionan directamente entre sí porque son mutuamente «ortogonales». No obstante, si la conciencia humana fuese capaz de recibir impresiones sensibles de uno de esos recintos diferenciados, quedaría así explicada una gran variedad de fenómenos, tanto ufológicos como paranormales. A efectos prácticos la realidad no es algo absoluto, sino condicional y relativo. Para una mente concreta en particular, su «realidad objetiva» estará en función de en qué dirección, hacia qué «área» específica focalice su atención.



Teoría De Las Realidades Alternativas


Recreación artística de un platillo volante sobre una base de la fuerza aérea estadounidense.

Formulada hacia el año 1966 por Allen Greenfield, plantea que la realidad no es algo fijo y estático, o al menos no lo es en nuestro presente estado de comprensión. Por lo tanto cabe que resultemos atrapados en alguna suerte de determinado estado de realidad, por medio de viajes o transmisiones en una cierta interrealidad. El universo en el que residimos sería sólo una porción de la totalidad de lo real.

A través de la historia, los habitantes de otras realidades alternativas han estado en contacto con la humanidad, por lo general con ánimo amistoso y en menor grado con propósitos hostiles, en orden a dominar a la población con manipulaciones encubiertas.

En la concepción einsteniana cabe concebir «atajos» espaciales por la producción de curvaturas locales (como los agujeros de gusano). Cuanto mayor es la cantidad de materia, mayor es también la curvatura del espacio en ese punto. Si la masa de un entorno fuese suficientemente grande y se hubiese llegado a un determinado radio de enrrollamiento, la curvatura circundante se cerraría sobre sí misma. Su contenido quedaría entonces aislado del resto del complejo espacio-temporal. Tal efecto se traduciría en una sorprendente desaparición de objetos materiales. Un cuerpo espacial que estuviese animado de una velocidad próxima a la de la luz adquiriría -según la teoría de la relatividad- masa necesaria para cerrar sobre sí mismo su propio campo gravitatorio. Pasaría de esta manera a otro plano diferente al del universo observable. Fuera de éste, la materia no estaría sometida a las mismas leyes físicas que rigen normalmente en su interior, pudiendo desaparecer y reaparecer en otros puntos del espacio, en escasísimo tiempo. Esta teoría ha sido propuesta por Schwarzschield.

Similares especulaciones hace Luis Schöenherr. Según este investigador los viajeros proceden realmente del espacio exterior, pero durante sus desplazamientos utilizan la cuarta dimensión para vencer las grandes distancias intersiderales. Es decir, son tridimensionales y se originan en nuestro mismo continuum de espacio-tiempo, pero para viajar fuera de él se valen transitoriamente de artilugios de la tecnología tetradimensional. Para evitar «cruzar» extensiones longitudinales, producirían con su avanzada técnica unas curvaturas locales en el espacio que ha de ser vencido; una vez conseguido ésto, ellos simplemente empezarían a surgir ante nuestra vista.



Otros Sistemas De Realidad
Los ovnis vienen de un universo de cuatro dimensiones, opina Raoul Foin; sus frecuentes desapariciones instantáneas se explicarían por la súbita transferencia al futuro, donde no les podemos percibir. Así pues, no surgen del espacio sino del tiempo. Podrían ser practicantes de la regresión temporal, que se complacen en examinarnos como a sus ancestros.

Otto Binder sugiere que serían seres de una diferente «zona del tiempo» y por ello sin existencia real, sólida y tangible en nuestro tiempo. Más bien se trataría de meras proyecciones a través de la barrera temporal.

Para John A.Keel, John R.Young y el Doctor Stannard, es posible que nos estemos topando con seres inteligentes de un «universo negativo» integrado por antimateria, que coexiste con el nuestro o lo interpenetra sin que seamos conscientes de ello. Aquello podría explicar el por qué tanto de los platillos volantes, del poltergeist, de las extrañas materias que caen inexplicablemente del cielo, etcétera.

Otra de las hipótesis postula que los ovnis no se originan en el convencional espacio exterior, sino que pertenecen al «espacio interior» del hombre. Para Matt Graeber, lo que hoy llamamos ovnis se denominó en otros momentos de la historia: visiones, dioses, santos y ángeles.



Un supuesto ovni fue golpeado y roto cerca de Aztec, en el estado de Nuevo Méjico, según relató el escritor Frank Scully.

Una explicación que no es aceptada por los medios oficiales sugiere que los ovnis son discos fabricados en los Estados Unidos. En Washington -según esta teoría- se habrían concedido varias patentes de invención y el Pentágono tendría en curso más de un proyecto de desarrollo y producción de platillos volantes. El ingeniero canadiense A.V.Roe, presidente de la compañía Avro de Otawa, ha diseñado varios modelos de aviones-platillo, tal vez por encargo de la Fuerza Aérea del poderoso país vecino. Un prototipo especial se sabe que fue concebido por Otis T.Carr, discípulo de Nicola Tesla.

Según el Doctor James E. McDonald, no sería nada rara la existencia de platillos experimentales, promocionados por las fuerzas armadas rusa y americana, por millonarios excéntricos o por sociedades secretas.

Recordemos que ya en 1897 las misteriosas aeronaves que invadieron el espacio aéreo estadounidense tomaban tierra frecuentemente y sus tripulantes declaraban que se trataba de vehículos eléctricos en fase de prueba. Noventa y cuatro años después, seguimos sin tener noticias de tan revolucionarios artefactos como tampoco las tenemos de las hipotéticas armas que las superpotencias fabrican.



Inventos Bélicos De La Alemania Nazi
Eric A.Aggen, R.Lusar, Olaf Meyer Freyhold y Renato Vasco plantean que los objetos no identificados pudieran ser muy bien armas secretas fabricadas por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Se sabe que científicos como Miethe, Habermohl, Bellonzo, Klein, Munch y otros trabajaron en Peenemunde y otros centros poniendo a punto los cohetes V-1, V-2. Estos técnicos del Tercer Reich, habrían continuado sus investigaciones en la URSS.

Andreas Faber-Kaiser ha publicado incluso los dibujos de unas «peonzas voladoras» alemanas diseñadas por Schriever que son auténticos platillos típicos de finales de los cuarenta y que se pueden encontrar en un libro del mayor Rudolf Lusar.



Exobiología Del Espacio


La visión de una formación de platillos volantes en junio de 1947, por el piloto Kenneth Arnold, desencadenó la fiebre del ovni.

Para el naturalista americano Ivan T.Sanderson, los ovnis pudieran ser formas zooespaciales, pues su conducta recuerda mucho a la de los animales. Las naves nodriza, para él, podrían desempeñar una función similar a la de las gallinas que empollan sus crías. Se ha observado que los ovnis viajan en manadas y se manifiestan como en oleadas migratorias. Hay millares de especies, con una apabullante variedad de formas y tamaños. Según Otto Binder, los ojos múltiples que estas criaturas exhiben son tomados habitualmente por ventanas o portezuelas.

Estas máquinas animales, indígenas del espacio, tal vez se alimenten de energía pura o directamente de rayos solares (al igual que las plantas lo hacen indirectamente a través de la fotosíntesis).

Para Trevor J.Constable y Erich Aggem, esas criaturas invisibles ameboides, originadas en el espacio y que poseen luz propia, recuerdan a los moluscos del océano. Aparentan ser metálicas, maniobran inteligentemente y tienen su hábitat natural en los dominios inobservables que rodean o interpenetran nuestro planeta. Estaríamos, en suma, ante formas de vida desconocidas, terrestres o extraterrestres.

La condesa Zoe Wassilko-Serecki dice que son especies hasta ahora no observadas de vida animal, pero autóctonas, de la ionosfera terrestre. Poseen estructuras huecas, con un mínimo de materia densa cargada de electricidad. Quizás sean el eslabón perdido entre la vida orgánica y la inorgánica y por eso dan la impresión de ser máquinas.

Otra interesante explicación la dan Ray Palmer y Otto Binder: en la «ionosfera radiante» donde se extiende el Cinturón Van Allen (de 2.000 a 65.000 kilómetros de altura), habita una civilización de seres inteligentes, invisibles a los ojos terrestres excepto bajo ciertas condiciones especiales. Estas criaturas radiantes se acercan esporádicamente a la superficie de la Tierra y, a la altura de la ionosfera, se hacen visibles debido a interacciones electromagnéticas como las tormentas del espacio o los huracanes solares. Tales entidades «radioactivas han creado una cultura tan vasta y diversificada como la nuestra, pero adaptada al «vacío» del espacio.

También se ha especulado con el «Sistema X», una máquina colosal que, según Aime Michel podría sobrevolar el mundo. Un colosal robot en órbita o sobre un planeta deshabitado del sistema solar que estaría manipulando no sólo a los ovnis sino a la humanidad entera.

Para C.Maxwell Cade y Oscar Galíndez, «no estamos tratando con seres personales ordinarios, sino más bien con inteligencias mecánicas, organismos abiológicos de conducta programable, una especie de androides originarios o derivados que actúan como cyborgs autónomos o telecomandados».

Es similar a la hipótesis de Galíndez la de Jean Luc Proust que propone que los ovnis serían entes que, tras un largo proceso evolutivo, se han convertido en supermáquinas vivientes, más rápidas, seguras y resistentes que el hombre. La nueva especie robotizada conservaría, no obstante, las trazas de su origen humano y sus órganos de comunicación con el hombre durante mucho tiempo, de la misma manera que los humanos contamos todavía con ciertos componentes anatómicos que ya nos resultan inútiles.



Viajeros Del Tiempo O De Otras Dimensiones


Uno de los casos más frecuentes de avistamientos ovni se refiere a grandes naves luminosas en forma de puro y con claraboyas iluminadas.

William E. Murphy opina que los platillos volantes serían el producto visible de la intersección o cortocircuito entre universos paralelos; en otras palabras, proyecciones inter-universos, «sombras» de los recintos extraterrestres de n dimensiones (para n mayor que 4), en nuestro medio 4-D que consiste en longitud, anchura, profundidad y movimiento en el tiempo.

También podrían ser máquinas del tiempo, suponiendo que éste representase a la cuarta dimensión. Sus ocupantes tal vez hayan aprendido la tecnología del transcurso cronológico y sean capaces de manipular a volutad y en cualquier dirección el flujo de los acontecimientos.

Para Luis Schöenherr, si la cuarta dimensión es formalmente idéntica al tiempo y éste no es, en esencia, diferente del espacio, lo realmente significativo será el conjunto del continuum Espacio-Tiempo. Por lo tanto, un movimiento en el tiempo es tan factible como en el espacio y así los ovnis podrían ser muy bien «dispositivos temporales» y originarse en el porvenir, como intuyó H.G.Wells. Las naves del espacio son para John M.Prytz manifestaciones de un Universo de antimateria o Universo paralelo. Cuando el cosmos fue creado, pudo formarse igual cantidad de materia que de antimateria, o bien cabe que las galaxias de antimateria estén mezcladas con las compuestas por la materia ordinaria. También es probable que existan masas comparables de ambas, en orden a mantener la simetría de la naturaleza, y cada una de ellas conforme a universos diferenciados a independientes.


¿De Dónde Vienen?

Bases Secretas En La Tierra






Recreación artística de un platillo volante observado en la localidad estadounidense de Helena, en el estado de Montana.

Los pilotos de los platillos volantes podrían ser criaturas que comparten la tierra con nosotros. Desconocidas para la mayoría de los mortales a ignoradas por la ciencia oficial, estos «ultraterrestres» son indígenas de nuestro propio planeta y la causa directa no sólo de la aparición de los ovnis sino de toda suerte de fenómenos psíquicos, paranormales y hasta religiosos. Esta idea, sustentada -entre otros- por el Doctor Jacques Vallée, se apoya en la abundancia de tradiciones orales y escritas sobre estas criaturas que aparecieron en muchísimas civilizaciones anteriores.

Entre las muchas razas que nos visitan, algunas de ellas podrían ser los habitantes de continentes perdidos (Atlántida, Lemuria o Mu) que antes de que éstos fuesen sepultados por el océano buscaron refugio en algún lugar seguro y recóndito de la tierra, en un recinto de naturaleza material o «etérica» conservando todas sus prerrogativas tecnológicas, entre ellas los dispositivos de avanzado diseño para vencer el espacio.

Sea que provengan de otros planetas y/o planos o de la propia Tierra, de manera transitoria o permanente pueden utilizar recintos especialmente acondicionados como bases de operaciones. Se ha especulado mucho sobre la posibilidad de que existan bases alienígenas secretas en áreas remotas como la Antártida, Groenlandia, la selva amazónica, las montañas del Tíbet, y muchos otros lugares deshabitados o semiexplorados.


¿Qué Pretenden Los Extraterrestres?




Según Jacques Scornaux, algunos humanoides podrían ser mortales capturados por los extraterrestres y sometidos a obediencia por los seres que comandan los ovnis. De esta manera, y si así les interesare, podrían explorar detalladamente el planeta con el concurso de estos biorobots teledirigidos, sin necesidad de que ellos se manifiesten directamente. Por manipulación genética han podido desarrollar innumerables razas de cyborgs humanos, cada una de ellas adaptada a las misiones especializadas que ha de desempeñar mezclada entre nosotros, del mismo modo que los ingenieros pecuarios crían centenares de especies caninas para la caza, guardería, cuidado del ganado, salvamento de personas, carreras, etcétera.

Las misteriosas desapariciones de seres humanos que parecen volatilizarse en el aire son una constante en los archivos policiales. Por otra parte, se sabe de varios casos en los que grotescos tripulantes de ovnis han aparecido acompañados de otras personas idénticas a los humanos terrestres. Los «contactados» a su vez indican que los alienígenas raptan -con diversos fines- a numerosos hombres y mujeres del medio terráqueo, siempre con el consentimiento consciente o inconsciente de los implicados.



Fenómenos De Mimetismo Y Camuflaje
Según John A.Keel, los ultraterrestres se nos han aparecido en el pasado asumiendo las formas fingidas que mejor cuadraban a los rasgos psicológicos y temperamentales de cada comunidad y sistema de creencias. En la segunda mitad del siglo XX remedan vehículos de lejanos planetas, porque es lo que mejor se adapta a la mentalidad tecnocrática de los nuevos tiempos. Y en el futuro seremos testigos del flujo en nuestro continuum de espacio-tiempo de una gama de fenómenos todavía mucho más extraños, anómalos y misteriosos que los objetos no identificados contemporáneos. Los ovnis y humanoides camaleónicos representan ante nuestra perpleja mirada lo que Jean Robin ha motejado como «La Gran Parodia»: una magnum opus de teatro cósmico, montada con tantos actos y sofisticadas escenas cual una excelente comedia de Shakespeare. He aquí algunos de los personajes y situaciones falsificados que, en el decurso del tiempo, han sido urdidos por los habilidosos adores del cielo:

Simulacros de seres mitológicos protohistóricos, dioses y héroes del Olimpo griego.

Dragones volantes en la China Imperial.

Arcas de la Alianza, columnas luminosas, carros de fuego, nubes resplandecientes y estrellas de Belén en episodios ligados a la cultura judeo-cristiana.

Cruces refulgentes en la atmósfera de la Edad Media (Carlomagno).

Soles que «se paran» hasta que una batalla se decide a favor del bando eclesiástico.

Ángeles y «enviados» en el contexto católico.

Decenas de miles de apariciones de una hermosa dama «con el brillo de mil soles», que durante ochocientos años se ha hecho pasar por «Nuestra Señora» o la «Virgen María».

Diablos infernales, deformes monstruos de las tinieblas y demonios tentadores que han martirizado a gentes escrupulosas en las edades oscuras.

Veintenas de casos de intrigantes formaciones de helicópteros en vuelo, plaga de los Estados Unidos en la década de los años setenta y vinculados a las mutilaciones de ganado. Son caricaturas de autogiros, pues jamás han sido identificados ni pertenecen a ningún helipuerto conocido.

El modelo más asombroso de mimetismo ufológico ha sido sacado a la luz pública por un brillante trabajo de Bertrand Meheust. A partir de 1880 los ovnis aparecen masivamente en los relatos de ciencia-ficción, copiando (o mejor pre-describiendo) con increíble exactitud y detallismo la profusa tipología ufológica que se desataría a partir de 1947. Con casi un siglo de antelación, los novelistas de lo que se suponía fantástico, han previsto con enorme precisión las escenas hoy tipificadas en relación con platos voladores, aterrizajes, humanoides, morfologías, aspecto exterior y comportamiento de los discos y cigarros extraterrestres. Ojeando estos arcaicos textos de segunda fila, parecería que estamos leyendo cualquier informe rutinario sobre los platillos volantes de nuestros días.

La ideología alienígena habría precedido masivamente y en el campo de lo inobservable (novelas baratas por entregas), a lo que ocurriría mucho después; de esta manera se habría hecho una preparación sibilina de la mentalidad popular con el fin de introducir progresivamente la noción de una multiplicidad de culturas en el cosmos.



Implicaciones Cataclísmicas


Prototipo de venusiano como los que contactaron con George Adamski en Desert Center (California), en 1952.

Por una oscura relación de causa y efecto que algún día descubriremos, el origen de los ovnis está ligado con eventos tales como huracanes, grandes tormentas, terremotos, erupciones volcánicas y otras hecatombes que siempre se han considerado obra de fuerzas ciegas de la naturaleza.

Los ovnis se suelen concentrar en estas áreas conflictivas por razones que se desconocen. Alberto Perego mantiene que están vinculados con una interminable serie de lo que el público toma por «accidentes» aleatorios, pero que a su juicio exhiben características que le llevan a calificarlos como intencionales. Efectivamente se nota una sospechosa repetitividad en determinados siniestros-tipo: caída de aviones, explosiones en portaaviones norteamericana cerca de China y Vietnam, trenes con combustibles químicos, convoyes de armas y municiones, colisiones de vehículos que transportan emigrantes y peregrinos religiosos, fulminantes incendios en asilos de ancianos y en hogares donde hay niños solos, etcétera. También se han registrado oleadas de calamidades con una frecuencia aparentemente superior a la media del azar, en ciertas áreas geográficas (Filipinas, Colombia, Pakistán) y durante épocas de miedo, odio violento e intensas agitaciones sociopolíticas. Los antiguos ya lo sabían, pues consideraban a los «escudos ardientes» del cielo como signos de mal agüero, anunciadores de seguras desgracias.

En opinión de Ramatís y otros «contactados», las adversidades destructivas no tienen nada de fortuítas, sino que son cuidadosamente preparadas por eficientes equipos de especialistas angélicos.

El motivo de fondo para que los ingenieros siderales programen con tanta meticulosidad dolorosas experiencias individuales o colectivas, no es disfrutar ejercitando una crueldad gratuita; muy por el contrario, ellos saben que las que parecen terribles desgracias de la vida nos son muy necesarias; más aún: resultan imprescindibles para el progreso interior y cumplen -aunque de ninguna manera lo parezca- una utilísima función catártica. Los infortunios, administrados con sabia oportunidad, constituirían la técnica de máxima eficacia conocida a fin de purificar moralmente el alma y el vector psicológico del individuo. Y sobre todo optimizan, en conjunto y a largo plazo, la velocidad de desarrollo evolutivo y espiritual de los seres conscientes.



Un sistema De Control


Escena cumbre de la película Encuentros en la Tercera Fase, de Steven Spielberg.

El fenómeno ovni, según Jacques Vallée, sería la manifestación de una realidad que trasciende al tiempo y al espacio. Ya es hora de que reconozcamos que el estudio de estos fenómenos no compete a la ciencia sino a la «Inteligencia», es decir, a los servicios de contraespionaje.

Existe un elaborado sistema de control metalógico del planeta Tierra, que ha entrado progresivamente en funcionamiento a partir de la Segunda Guerra Mundial, cuando los viejos mitos se han vuelto inservibles. Este nivel de intervención en la sociedad terrestre funciona como un regulador de su desarrollo, e influye en la conducta del género humano. Los ovnis constituyen una manifestación simbólica, una poderosa imaginería proyectada para alterar los sistemas individuales y colectivos de valores y comportamientos. La tecnología ufológica distorsiona el sentido de realidad del observador y afecta a la conciencia humana con sofisticadas técnicas psicotrónicas, en orden a generar transformaciones psicosociales, políticas y económicas en la biosfera cerebrada de este planeta.

Los ovnis serían dispositivos que originan una deformación en la estructura de realidad del espectador, con el propósito deliberado de proyectar imágenes y representar escenas, a modo de un gigantesco drama teatral, diseñadas para cambiar nuestro acervo de creencias.

«Ellos» constituyen una bomba social de relojería y ejecutan sus papeles en un vasto plan de seducción subliminal, cuidándose mucho de tomar sus conceptos ideológicos de los propios arquetipos básicos del género humano, con lo que buscan forzar un cambio global del comportamiento colectivo. El mecanismo de vigilancia del medio humano que utilizan los ovnis, podría estar localizado en el espacio exterior. Esta ingeniería anímica sería tal vez originada en otro mundo y es, a la vez, física, psíquica y espiritual, capaz de un hábil amaño de la mentalidad pública.

¿Podrían ser, en última instancia los «Manipuladores» nada más que un grupo humano, que ha conseguido ostentar una forma muy avanzada de poder psicotrónico?... Debemos considerar también que las riendas se manejan desde «Magonia», una suerte de universo paralelo imbricado con el nuestro, pero inaccesible tanto a los sentidos como a la razón del hombre ordinario. El tiempo en Magonia no fluiría a la misma velocidad que en la Tierra, ni el espacio allí sería una mera extensión longitudinal como nos enseña la ciencia física.

Algunos dicen que los ovnis son un cuerpo de policía estelar que trabaja como guardas-jurados para protegernos de la eventual agresión de hordas alienígenas a imperialistas. Al mismo tiempo, también se ocupar de impedir nuestras expediciones de conquista al espacio exterior y del que estalle una Tercera Guerra Mundial, la que podría desaparecer la biosfera terrestre y originarse una deflagración atómica en cadena que haría peligrar seriamente el equilibrio y la seguridad del mismo sol y su familia de planetas. Según muchos «hombres-contacto» que aseguran recibir mensajes de otra dimensión, los moradores de los mundos vecinos tomarán contacto con nosotros y de forma contundente, para neutralizar con métodos coercitivos la hecatombe de un conflicto nuclear, rompiendo así, por tan graves y justificados motivos, su tónica acostumbrada de no-contacto.

Dan Lloyd postula que en el universo hay ciertas categorías de seres espirituales cuyo propósito es obstaculizar la verdadera evolución de la humanidad. Inducen deliberadamente conceptos materialistas para evitar el libre pensamiento e impedir que el auténtico conocimiento espiritual sea aplicado en las actividades humanas vitales: educación, medicina, ciencia, arte y religión. Estas personalidades malignas eran ya bien conocidas en la antigua Persia con el nombre genérico de Arimán y como Satán, en la Biblia. Estarían sembrando la ilusión de que máquinas físicas están llegando a la tierra cargadas de hombres corporales del espacio exterior, es decir alienígenas, lo que no sería más que un gran cuadro alucinatorio inducido a propósito


y porque no entran en contacto con nosotros


¿Por Qué No Entran En Contacto Con Nosotros?



El no-contacto es una realidad, sin perjuicio de que entre los extraterrestres y la raza humana se estén produciendo, en gran escala, otras modalidades menos patentes de interrelación, distintas al contacto abierto. En otras palabras, aunque el hombre de la calle no lo sepa, el contacto existe según los «contactados»-, no sólo en una sino en varias formas, y la única suerte de comunicación por ahora ausente, es el establecimiento de relaciones bilaterales, ostensibles y a la vista de todos.

Pudiera ser que un acercamiento mutuo se conceda en exclusividad a las especies evolucionadas y que el aislamiento, al menos parcial, de la raza inferior con respecto a la superior, sea la tónica ante civilizaciones que se encuentran en su primer estadio de despegue cultural.

¿Vivimos en un planeta joven y por ello la transferencia de información en dos direcciones no está aún formalizada?... ¿Somos una excepción, es atípico y claramente anormal lo que está ocurriendo aquí?, ¿O estamos experimentando la secuencia rutinaria de acontecimientos que han tenido lugar anteriormente en trillones de planetas?

Las generaciones venideras tal vez encuentren explicaciones a tantos desalentadores interrogantes sobre la normativa del canje de embajadores entre planetas. Por nuestra parte, hemos de contentarnos con ejercitar la imaginación controlada y recomponer el imposible rompecabezas en base a un ingente montón de datos aislados.

Se reportan unas cien observaciones al día, pero como sale a la luz un exiguo diez por ciento de los casos, quiere decir que se producen más de treinta mil incidentes en el mes, y millares de fotografías, captaciones de radar, aterrizajes, paseos de humanoides y monstruos antiestéticos, huellas y residuos en el terreno, agresiones, raptos de personas, «contactados» y el cuento de nunca acabar. Un espionaje bien planeado, que se concentra preferentemente en determinadas áreas neurálgicas: embalses de agua potable, instalaciones atómicas, bases militares, grandes factorías, centrales eléctricas, torres de microondas, nudos de comunicaciones y otras.

Como ha comentado Aimé Michel, la ausencia del contacto es uno de los elementos del magno «festival del absurdo» extraterrestre, y el problema número uno que nos plantea el fenómeno. ¿Por qué no se manifiestan?, clama la opinión pública. Al estudiar una batería de eventuales respuestas, es preciso recordar que quizás no obedezcan a un solo motivo sino a muchos, como corresponde a la pasmosa complejidad del problema del no-contacto.



Algunas Posibles Respuestas
La situación y desarrollo evolutivo de un sistema no pueden ser alterados por agentes externos al mismo, a fin de que los miembros de este colectivo asuman la responsabilidad de adoptar decisiones autónomas, de ejercer el derecho a crear su propio destino sin interferencias exógenas. Según este principio de no-intervención, ninguna humanidad planetaria está autorizada a perturbar el curso histórico de otra, a excepción de los centros decisorios encargados por la legislación del universo observable, de su supervisión, dirección y control. Su equivalencia a escala unitaria es la sagrada preservación del libre albedrío individual, ya que la realidad podría ser un conjunto de radical y absoluta autodeterminación en todos sus múltiples niveles.

Hay quienes opinan que el no-contacto es sólo transitorio; algo así como una medida precautoria, o cuarentena. Por ahora se encuentran interrumpidas las comunicaciones inter-espaciales, debido a violaciones históricas de la normativa global. En terminología teológica el bloqueo provisional de relaciones abiertas bilaterales sería producto del pecado original o de la rebelión de Lucifer. La teoría del aislamiento punitivo es vigorosamente defendida por los anónimos autores del fascinante «Libro de Urantia» (Chicago, 1955).

Es posible que haya un insalvable desnivel de psiquismo entre los supuestos visitantes y nosotros. Una comunicación eficaz implica la comprensión del mensaje recibido. Pero supongamos que las especies que merodean por nuestra atmósfera hayan seguido otra línea evolutiva; su inteligencia se ha desarrollado en diferente dirección o pertenecen a sistemas que nos son abismalmente extraños (multidimensionalidad, universos paralelos, frecuencias vibratorias interpenetradas, «realidades probables» de Seth, etcétera), con un mecanismo cerebral (y su consiguiente proceso lógico), aparato psíquico y dotación sensorial fantásticamente diversos a los del Homo Sapiens. En tales circunstancias (muy probables además en un universo cuya primera magnificencia observable es su asombrosa diversidad), cabe esperar barreras mentales y lógicas infranqueables, la incomunicabilidad radical entre sistemas. Lo que no debe de extrañarnos, pues somos incapaces de dirigir signos y señales reconocibles a los millones de especies animales que nos rodean y no sabemos decirle «me gustas» a un rododendro.

Pudiera ser también que no bajen para no enfermar pues no son inmunes a los gérmenes y dolencias terrestres. O bien porque no soportan nuestro medio.

Hay otra «atmósfera» psíquica o radio-biológica, que tampoco resisten según algunos «contactados». Son gente normal, incapaz de convivir en un ambiente de odio y miseria ética tan degradado como el terrestre. Se sienten desgraciados en mitad de un océano de pensamientos y vibraciones «densos» y de baja estofa.

Si tienen un nivel tan alto y tan desarrollado de inteligencia, puede ser que no les causemos ninguna gracia. Exponerse a nuestro rudimentario sentido del humor, perturbaría gravemente sus circuitos anímicos. Ni siquiera se conmoverían con las sutiles ironías británicas y encontrarían intolerable convivir con personas que no les capten al vuelo sus «golpes». Sólo este importante motivo sería ya una explicación para el no-contacto.



Somos Muy Primitivos


Ovni que ilustraba el famoso «Informe Hynek» sobre objetos volantes no identificados, encargado por el gobierno de EE.UU.

A quién se le ocurriría «contactar» con un montón de estiércol?... Nuestra perpetua historia de sangre, sudor y lágrimas hace sospechar que nos han destinado a un receptáculo de vida de moralidad atípica, donde por razones de economía y eficiencia penal han concentrado a los espíritus delincuentes, incorregibles y gamberros de una vasta región de la Vía Láctea. Un maldito basurero cósmico, donde sufren condena toda suerte de canallas e inadaptados, no merece desde luego lazos de amistad. Y no debemos culparles; reconozcamos que nadie va de gira a un Sing-Sing debidamente aislado en el espacio y que no es apetecible tratar con el «lumpen» residual de desterrados de muchos planetas cercanos, al menos antes de que se reformen y rehabiliten.


¿Son reales los Ovnis en la misma medida en que decimos que son reales los cohetes espaciales? La prueba más segura sería tener alguno a nuestra disposición. Según ciertos rumores insistentes, esto habría ocurrido en algunos países; el gobierno de Estados Unidos habría capturado un Ovni, y mantendría el hecho en el más absoluto secreto. Pero esto no es más que una conjetura, a pesar de los juramentos que han formulado pretendidos testigos. De hecho, la hipótesis de una intervención -o de una no intervención- gubernamental es otro aspecto fascinante de la controversia sobre los Ovnis.

A falta de un Ovni "real" que pudiéramos tocar y examinar, existen muchísimas "pruebas" de la realidad del fenómeno, en forma de fotografías y algunas películas. La mayoría de estos documentos son, sin lugar a dudas, falsos; incluso cuando los presentan personas aparentemente de buena fe, son tan borrosos, tomados de tan lejos o tan ambiguos que no hacen más que agregar una nueva dimensión al problema: ¿por qué, si los Ovnis existen, no hemos obtenido mejores pruebas fotográficas, en una época en que tanta gente tiene la costumbre de llevar siempre consigo cámaras fotográficas o videocámaras?

Entre las pruebas más sólidas que poseemos acerca de este fenómeno, hay que examinar los efectos causados por los Ovnis sobre el en torno, el paisaje y los objetos, y en particular sobre los motores.


Asimismo, si los Ovnis son objetos físicos, deben provenir de algún lado. Cuando se observaron los primeros (de este siglo), en los años cuarenta, se supuso que tenían origen terrestre. Los norteamericanos pensaron que se trataba de aparatos secretos soviéticos, quizá perfeccionados gracias a los conocimientos aportados por los científicos alemanes que habían caído prisioneros al finalizar la segunda guerra mundial. Pero, dado que se observaban aparatos idénticos en todo el mundo, se hizo evidente que ninguna nación terrestre podía ser su artífice.

No obstante, aunque el número de fuentes potenciales de vida en el Universo sea virtualmente infinito, la probabilidad de que exista una civilización con un estado de desarrollo tal que le permita efectuar viajes espaciales es ínfima. Resulta desalentador el hecho de que no se haya descubierto ninguna prueba irrefutable para sostener la hipótesis del origen extraterrestre de los Ovnis: es la mejor explicación que poseemos, pero no pasa de ser una especulación.


¿Mensajes Del Espacio?
Hoy se admite generalmente que los Ovnis plantean un problema no sólo al astrónomo y al físico, sino también al sabio "ortodoxo", con lo cual el estudio global de este tema requiere hasta cierto punto un enfoque interdisciplinar: los psicólogos confirman que la respuesta de un individuo frente a este fenómeno viene condicionada por su perfil psicológico, mientras que el sociólogo relaciona estas respuestas con los modelos culturales; el antropólogo señala ciertos paralelismos con mitos y creencias tradicionales, mientras que el parapsicólogo destaca que las observaciones de Ovnis a menudo van acompañadas de manifestaciones psíquicas, como la precognición y el fenómeno poltergeist. Esto último se aplica particular mente a los casos de "encuentros", cuando el observador afirma haber entrado en contacto y haberse comunicado con los ocupantes de un Ovni. Estas entidades suelen ser descritas como criaturas extraterrestres, diferentes de nosotros, y que a menudo se presentan como embajadores de una potencia intergaláctica; su finalidad es observar a los seres humanos, prevenirles contra la inadecuada utilización de los recursos terrestres y hacerles llegar mensajes de amistad procedentes de una Fraternidad cósmica.

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